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Llegar al trabajo es un suplicio en la era del coronavirus
Los tiempos de cuarentena se convirtieron en un verdadero suplicio a la hora de transportarse de una zona a otra y sin servicio de transporte público. El 16 de marzo el presidente Alejandro Giammattei anunció medidas sanitarias drásticas, para contener la propagación del Covid-19. Y, entre ellas, la paralización del transporte colectivo, lo cual provocó, […]
Publicado el 01 Abr 2020

Llegar al trabajo es un suplicio en la era del coronavirus

Los tiempos de cuarentena se convirtieron en un verdadero suplicio a la hora de transportarse de una zona a otra y sin servicio de transporte público.

El 16 de marzo el presidente Alejandro Giammattei anunció medidas sanitarias drásticas, para contener la propagación del Covid-19. Y, entre ellas, la paralización del transporte colectivo, lo cual provocó, que los primeros días buena parte de la actividad económica del país se paralizara.

No obstante, las empresas debieron continuar con el trabajo y, por ende, los trabajadores deben movilizarse.

Magaly Méndez, una chica que viven en la zona 12 de Villa Nueva, y trabaja en la zona 15 describe así sus días:

Yo me he tenido que trasportar en mototaxi, taxis o en carros particulares que llevan gente y no me queda de otra que subirme en ellos.

Esta opción tiene sus costos: no son seguros y además triplican su para trasladarse, pues en circunstancias normales gasta Q10 diarios:

Cuanto tengo suerte me dan jalón, pero a aun así debo buscar otros medios de trasporte para llegar hasta mi casa y he tenido que pagar desde Q20, Q30 y Q40.

Maritza Vásquez, representante de la Asociación de Empleadas de Casa, cuenta el caso de una trabajadora que, al no contar con posibilidades económicas, optó por caminar de su casa al trabajo:

Es exagerado, estaba caminando 3 horas diarias para llegar donde los empleadores. Y nos preguntó qué hacía y le dijimos que pidiera a sus patronos quedarse en su casa porque no podría estar caminando tres horas en la mañana y tres en la tarde – desde la zona 18 a la zona 7- entonces nos escribió y nos contó que dijeron que se quede en su vivienda –lo que no le dijeron era si le iban a pagar-.

Los primeros días de cuarentena y de suspensión de trasporte público, hubo quienes aprovecharon la demanda: taxis y mototaxis, Ubers. Además estaban buses privados, carros particulares e incluso camiones que trasladaron personas, pero en Mixco fueron multados. Roger Escalante, gerente de la Policía Municipal de Tránsito de Mixco, comenta:

En la primera semana, registramos entre 10 y 15 vehículos que no contaban con autorización y que trasladaban a personas y se procedió a una multa de Q500, pero esto se logró detener y ya no se han registrado casos similares. Se logró detener incluso camiones que no tenían los permisos.

Para facilitar la movilidad de trabajadores de empresas sin restricción para operar, el Ministerio de Economía emitió permisos a fin de que los vehículos de las compañías pudieran trasladar a sus empleados de casa al trabajo y viceversa.

Santos Bernardo, un hombre de 52 años que trabaja en una recicladora, cuenta que la primera semana de la declaración de cuarentena debió de buscar sus propios recursos para llegar al trabajo, pero posteriormente la empresa habilitó buses que los llevan y traen:

Yo entro a las 6 am y pasan a las 5 am a dos cuadras de mi casa y cuando salimos también nos deja cerca. Es un bus escolar, nos proporcionan gel y mascarilla cuando subimos al bus.

El trasporte público por disposición gubernamental continuará suspendido hasta el 05 de mayo, según se dispuso con la ampliación del Estado de Calamidad por otros 30 días. Entre las principales denuncias que ha recibido la Inspectoría General de Trabajo se encuentra la falta de trasporte y medidas de sanidad.

Henry Bin

Periodista

Sobre Henry Bin

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