El fin de semana fue viral un video que muestra la agresión que sufrió el subjefe de una agencia de Banco Industrial, ante la mirada pávida de agentes de seguridad privada, que no intervinieron ante los golpes que un hombre propinaba al personero bancario. Lo que se sabe es que el sujeto se enfureció cuando su esposa no pudo realizar una transacción y arremetió contra el personal. La grabación de video fue captada por un usuario y deja claro que los guardias de seguridad permitieron la golpiza, pese a los gritos de una mujer que pide ayuda. El agresor, según las voces en el video, se encontraba armado.

En comunicado de prensa el banco condenó el incidente y dijo que se “han tomado acciones respecto a la empresa con la que se terceriza el servicio de seguridad”.

Mario Mérida, coronel retirado y experto en temas de seguridad:

los de seguridad del banco debieron haber actuado porque pudo ser una distracción para asaltar el banco y en el caso que fue una agresión, debieron detenerlo en lo que llega la policía.

Mérida remite al artículo 4 de la ley que rige las empresas de seguridad privada en cuanto a que: estas empresas “deberán prestar su colaboración y brindar información que ayude a prevenir la comisión de hechos delictivos”.

“Esa es parte de la capacitación de los agentes, es obvio que ahí había una agresión que pudo causar desorden público”.

 Capacitaciones sin control 

De acuerdo con el artículo 7 de la ley, la Dirección General de Empresas Privadas de Seguridad (DIGESSP) debe definir y autorizar los contenidos de los programas de formación y capacitación de agentes, personal administrativo y operativo de los prestadores de servicios de seguridad. La norma establece que los policías deben ser mayores de 18 años, haber cursado tercero básico, aprobar el curso de capacitación especial diseñado por el prestador de servicios de seguridad, el que deberá completar en un plazo de 18 meses a contar desde su ingreso al servicio

ConCriterio entrevistó a dos guardias privados que revelan que sus capacitaciones no llegan a los 18 meses: se trató de un entreno exprés.

La empresa de seguridad privada le da capacitación como mínimo una semana, aunque muchos de los que trabajamos ahí prestamos servicio militar.

En esa semana la inducción abarca:

Nos enseñan cómo entregar y recibir el arma, consignas y aspectos del área de trabajo, como desenfundar el arma. Solo eso.

El otro agente reafirma:

Como medio día me capacitaron cuando yo entré, solo le dan algunas instrucciones.

ConCriterio solicitó una entrevista con el director de la DIGESSP, pero la respuesta fue que por cuestiones de agenda no podía atender, lo mismo dijeron en la Gremial de Empresas de Seguridad Privada.

De acuerdo con la DGESSP al 08 de noviembre de este año, la institución ha autorizado credenciales a 18 mil 656 agentes y hay 239 empresas autorizadas.

Stu Velasco, exsubdirector de Investigación Criminal de la Policía Nacional Civil (PNC), cree que lo ocurrido en la agencia bancaria es un llamado de atención a la empresa a revisar sus protocolos de seguridad y también verificar la forma de cómo contrata a los guardias:

Debe haber controles y sanciones para las empresas que reclutan al instante al personal, sin un estudio psicológico y de capacidades para administrar los incidentes que puedan ocurrir.

En este caso el banco dijo que tomó acciones hacia la empresa en quienes tercerizan su seguridad. Y Stu, hace una anotación:

A veces las empresas pagan Q7 mil por los servicios de seguridad creyendo que los agentes tienen un buen perfil, pero no saben las condiciones de los agentes y esto puede resultar en tragedias.

En los últimos años hay varios reportes de prensa en donde agentes de seguridad privada han sido arrestados por supuestos mal manejo de armas.