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Elecciones 2023: Síntomas pre fraude
El objetivo sería lograr una maquinaria electoral conformada por 200 alcaldes bien dotados de fondos públicos para conseguir cada uno 5 mil votos a favor de los oficialistas el día de las elecciones.
Publicado el 19 Ago 2022

Si en este momento usted le toma la temperatura a la paciente que se llama Guatemala encontrará que empieza a mostrar fiebre. Ese es sólo un síntoma de la combustión interna que vive la enfermita.

Diferentes actores políticos y económicos empiezan a tomarse en serio la amenaza que supone un intento de manipulación electoral presuntamente promovido por el presidente Alejandro Giammattei y su entorno para favorecer al candidato oficialista. Aunque en realidad sea para garantizar la continuidad del enriquecimiento de Miguel Martínez y los suyos. Y eso genera turbación. Y envidias.

Hay quien piensa que todo se diseña para lograr una segunda vuelta electoral entre Sandra Torres y Manuel Conde. De esa manera, y solo de esa manera, el ungido de Giammatei tendría posibilidades de triunfo.  Seguramente usted se percató de la resolución legal que esta semana vuelve a darle vida a las aspiraciones de la propietaria de ese mecanismo de corrupción que se llama Unidad Nacional de la Esperanza.

Luego ¿cómo se llegaría al escenario deseado? Mediante la maquinaria electoral que supone el reclutamiento de 200 alcaldes bien dotados de fondos públicos para conseguir cada uno 5 mil votos a favor de los oficialistas el día de las elecciones, tal y como lo sugiere el reportaje de La Hora.

Además, se prevé que se bloquee candidaturas como la de Zury Ríos, abanderada del gran capital guatemalteco y la de Thelma Cabrera, la aspirante por parte del Movimiento para la Liberación de los Pueblos y el Comité de Desarrollo Campesino (CODECA). El de Cabrera se ve muy probable. El bloqueo a Zury parece más complicado. Para lograrlo, se necesitaría que al menos tres de los cinco votos leales al Ejecutivo entre los titulares de la Corte de Constitucionalidad dieran su visto bueno. Sin embargo, ahí se corren un riesgo grande el presidente Giammatei y Miguel Martínez. Que los magistrados de pronto prefirieran alinearse con el poder económico y no con el poder político al considerarlo menos perecedero. Claro que el presidente Giammatei siempre podría contar con la docilidad del Ministerio Público ante sus designios para garantizar la efectividad de cualquier medida tipo Daniel Ortega en Guatemala. A menos que tan bien ahí le salga la criada respondona.

En fin, que no es un panorama placentero para el status quo y de ahí que sufra de fiebres.

La compra de granadas y gases lacrimógenos para reprimir manifestaciones, la testarudez de los aliados oficialistas para aprobar la ley de fortalecimiento a la PNC y al Ejército, a la SAAS y a la guardia de Presidios, la captura de José Rubén Zamora, son indicadores de que el régimen se prepara para aplastar cualquier ruidoso disenso. Cualquiera.

En consecuencia lo que se percibe es un temor grande al empecinamiento y la arbitrariedad de Giammatei. Y con tanto poder concentrado, que quienes ahora empiezan a tenerle miedo pusieron en sus manos, todo el mundo lamenta que después de la calentura vengan las convulsiones.

Del lado opuesto del cuadrante político no se observa ninguna cura probable a tanto mal. Los pequeños partidos de centro izquierda e izquierda simplemente no alcanzan un acuerdo de unidad para presentar una candidatura única que no pueda ser bloqueada desde la Contraloría o el Ministerio Público y que refleje un mínimo de carisma para ser competitiva.

De manera que la paciente está malita. Y no se ve remedio al alcance para sus males.

Juan Luis Font

33 años de hacer periodismo, reportear, conducir, fundar y dirigir medios.

Sobre Juan Luis Font

33 años de hacer periodismo, reportear, conducir, fundar y dirigir medios.