Guatemala cuenta ahora con 37 mil 968 agentes de la Policía Nacional Civil (PNC), esto equivale a 22.5 policías para cuidar a 10 mil habitantes. Esta fuerza se reduce cuando las autoridades concentran a sus equipos en masivas manifestaciones, lo cual provoca descuidar ciertas áreas del país.

Febrero arrancó con un llamado a la concentración de la fuerza policial, pese a que en 2020 apenas descasaron ya que velaron por el cumplimento de las medidas de confinamiento. El aviso: “se suspenden vacaciones, con el objetivo de garantizar la protección a la vida, integridad física y el patrimonio de la población; siendo indispensable el resguardo de la seguridad y el orden público (…)”

Hay agentes que dicen que la coyuntura actual alarma a las autoridades “están atentos a la organización ciudadana por los recientes acontecimientos”, dicen.  Se refiere a las ciertas acciones, como la juramentación del juez Mynor Moto en el Congreso y la llegada de este a la Corte de Constitucionalidad. Ese hecho llevó a destacar unos 10 elementos para controlar a un grupo ciudadanos que manifestaban inconformes. Un agente que declina identificarse:

“Hasta el ministerio de Trabajo debería de estar analizando cómo es posible que el policía trabaje tantas horas corrido y todavía sea el que menos incentivos económicos recibe al año y el que más está golpeado”.

Un agente raso devenga Q3 mil 800 mensuales, con las bonificaciones se nivela en Q5 mil 700. Las horas de trabajo son 8 diarias, pero cuando hay suspensiones de descanso, laboran incluso 12 cada día cuenta el agente. Las condiciones se complican más por el hacinamiento en comisarías donde no cuentan con las condiciones adecuadas:

“Como nadie sale, toca dormir en el suelo y es más complicado porque los autopatrullas que hay, muchas están en mal estado… entonces la mayoría del trabajo se hace a pie. ¿Para qué se tienen a más personas si no se tiene la capacidad y no se cuenta con el equipo?”

Jorge Aguilar, vocero de la institución, negó que los descansos se hayan suspendido por riesgo de protesta social y recalcó lo descrito en la nota policial:

“Con la finalidad de la seguridad ciudadana y de los bienes de los guatemaltecos, en su momento se dará a conocer la reanudación de las vacaciones”.

El informe 2020-2021 del Centro de Observancia de Seguridad Ciudadana del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN) reportó reducción de la criminalidad, la tasa 6.2 por cada 10 mil habitantes. Los toques de queda y 10 los estados de prevención en 2020 apoyaron la baja. No obstante, solo en 2020 la institución se vio debilitada con el cambio de tres directores en un año. Francisco Quezada, analista investigador del CIEN:

Tenemos que focalizarnos en la preparación del agente, porque la preparación de la Academia es crucial. Hemos visto que su formación se especializa, pero su educación ya no sube, por lo que apostarle al perfil de ingreso y soporte durante la carrera de los agentes. Hay que reflexionar sobre el retiro por jubilaciones prematuras porque muchas veces se pierde la experiencia.

La instrucción para la concentración es traer: arma de fuego, batón, linterna y grilletes y uniforme negro. Además, están advertidos a evitar la propagación del Coronavirus.