Ya las dudas y cuestionamientos sobre cómo el ministerio de Comunicaciones Infraestructura y Vivienda (MICIVI) hace entrega de contratos millonarios a empresas con poca experiencia y capacidad son generalizadas. Son diputados de oposición y empresarios quienes han pedido a la Contraloría General de Cuentas (CGC) revisar los contratos y reclaman la ausencia del contralor.
Ante la presión y las dudas, José Ramírez Crispín, subcontralor de cuentas, asegura que la CGC autorizó una auditoría especial para revisar los contratos en el marco de la ampliación presupuestaria de Q3.1 millardos, avalada por el Congreso de la República, en marzo. Ramírez Crispín, dice que ocho auditores evalúan ocho contratos:
¿Por qué interés en estos 8 contratos? Es por todo el tema de denuncias, pero también en la Contraloría tenemos una unidad de análisis y monitoreo de alerta temprana y se hace una evaluación de Guatecompras. Si los analistas determinan que se haga una auditoría, nos envían la información; además a través de la materialidad de la compra.
El funcionario no revela detalles de los proyectos bajo análisis: No le puedo dar un dato porque la auditoría está en proceso y esta es la que va a determinar ese dato porque es precisamente para eso.
Ramírez Crispín dice que hace dos semanas se destacó al personal para iniciar con la auditoria concurrente y que:
El manual de auditoría concurrente establece que la verificación se inicia cuando se empieza con la preparación de las bases; luego el proceso de verificación en Guatecompras; apertura de ofertas y puede llegar hasta la recepción y liquidación de una obra. Puede ser que sean tres meses o más tiempos.
Edy Cux, abogado del Centro Legal Anticorrupción, una organización que fiscaliza la administración pública:
La contraloría ha sido inoperante en los últimos años, especialmente en esta administración. Recordemos las grandes cantidades de dinero invertidas para la pandemia y que recuerdo no ha habido un informe contundente respecto al monitoreo de esos fondos, especialmente contratos como el de las vacunas. Y ahora vemos una vez más esa ausencia con la inversión tan grande que hay en el MICIVI y tenemos que tener claro que este es el centro neurálgico de la corrupción.
Siempre se genera una especie de desinformación, creo que muchas de las cosas que suceden es que las entidades no dan mucha información de cómo van los procesos. Si hubiera transparencia, sería mejor porque cuando no hay información todos especulamos.
Cux responde:
No hay especulación, hay un modus operandi, es evidente la sobrevaloración de algunos contratos y desde el ciclo presupuestario ni cómo se asignaron esos recursos ni el destino de las obras está claro. La contraloría debiese revisar contrato por contrato, tener una metodología específica para ello.
Con la ampliación, el presupuesto de Comunicaciones subió a Q8.5 millardos. Y de los Q3 millardos de incremento, Q2.5 millardos están destinados para recuperación de infraestructura. La planificación puede verse como “chapuces”: recapeo, rehabilitación y señalización; en total 718 kilómetros de intervención, mientras que los kilómetros de construcción no pasan de 1.