Hoy cumple 7 días la jornada de” 21 días de ayuno y oración” promovida por un grupo de iglesias evangélicas. La actividad no pasa desapercibida desde que en redes sociales del gobierno y del Organismo Judicial (OJ) se unieron a la campaña.
Los usuarios de redes sociales salieron al paso a cuestionar por qué los sitios oficiales promueven estos eventos, en particular cuando la Constitución separa religión y el Estado.
César Vásquez, pastor expresidente de la Alianza Evangélica e integrante de la Alianza Evangélica Latina, cree que esa división es imposible:
Es un fenómeno: siempre va a tener efectos negativos para las instituciones. No se puede aislar totalmente la vida social, política y económica con lo religioso.
Lizardo Acuña, investigador en temas de seguridad y justicia, en cambio contrapone:
Creo que sí, el Estado es laico y sus instituciones deben responder al ejercicio de las funciones que le confiere la ley. El tema religioso es muy personal y ambas actividades deben separarse.
Guatemala no es ajena a este populismo religioso y los líderes de la iglesia evangélica están conscientes. Vásquez señala que varios funcionarios se identifican como creyentes, pero no lo son. El pastor afirma que los políticos solo buscan sacar provecho de la religión:
Algunos creen que declararse cristianos les abre más puertas y dicen que son lo que no lo son. Siempre nos hacemos esa pregunta: ¿Por qué si hay tantos evangélicos, por qué no bajan los fenómenos de corrupción y delincuencia?
-Y ¿lo ve mucho en la política?
Sí, en la política vemos un porcentaje altísimo, la confesión evangélica es solo para ganar votos, que haya surgido un verdadero creyente para postularse, no lo hay, ¡qué pena!
Moisés Fuentes, parte del comité organizador de la jornada de ayuno e integrante del Consejo Apostólico de Guatemala, tampoco descarta falsos profetas en la política:
Pero nos interesa ver a políticos, orar porque eso significa que tienen necesidad de Dios. Si es genuino o no, cada quien sabe el corazón con el que lo hace.
Guatemala tiene antecedentes de gobernantes evangélicos en los últimos 40 años: el exjefe de Facto Efraín Ríos Mont, el golpista Jorge Serrano Elías y el más reciente, Jimmy Morales.
Pablo Rangel, sociólogo:
Ahora hay grupos neopentecostales o neoconservadores también, principalmente en Estados Unidos que articulan acciones en todo el continente, a través de desayunos, jornadas de milagros.
La penetración política se basa en la religión:
Va hacer que las acciones no sean percibidas como acciones crudas, sino que son vistas siempre bajo el paraguas de la religión y eso ayuda para quien está gobernando. Es un enmascaramiento: uno puede decir cualquier barrabasada y al final mandar bendiciones y la gente se va a quedar con eso; van a decir por lo menos él es cristiano.
El plan dedicará el 28 de enero una oración por erradicar la corrupción, ese día la lectura será Deuteronomio 16:19-29:
No tuerzas el derecho; no hagas acepción de personas, ni tomes soborno; porque el soborno ciega los ojos de los sabios y pervierte las palabras de los justos.
Karla Herrera, una trabajadora del Congreso de la República, participa en el ayuno desde hace unos 8 años.
Para nosotros es importante entregar este sacrificio en los primeros días del año para que Dios nos bendiga en todas las actividades que vamos a hacer, no solo es aguantar hambre, sino tener tiempos de oración y comunidad con la familia”.
En sus oraciones no solo incluye a su familia, sino también a las autoridades:
Para que Dios les de discernimiento y tomar buenas decisiones, en los montes de gobernanza: Presidente, diputados, municipalidades, todo lo que tenga que ver con la gobernabilidad.
La página oficial de los 21 días de ayuno y oración reportó 1 mil 076 seguidores del reto.
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