No pasa aún la resaca del presupuesto y el desafuero a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), pero el oficialismo y sus aliados trazan su próxima meta: coronar la Junta Directiva del Congreso 2024 y aunque debe elegirse el 14 de enero, las negociaciones ya empezaron.

Entre los nominados para presidir: Allan Rodríguez y Shirley Rivera, quienes ya estuvieron en ese cargo y han sido operadores del presidente Alejandro Giammattei; también surge otro candidato fuerte: Boris España, diputado reelecto por VAMOS, quien dirigió la plenaria del jueves en donde se aprobaron Q124 millardos del cuestionado presupuesto 2024 y el retiro de la inmunidad a los magistrados del TSE. Un error de quien operaba los micrófonos dejó ver que España recibía instrucciones por teléfono de alguien fuera del Hemiciclo.

Boris España-al micrófono- exdiputado de TODOS, reelecto con VAMOS.

En la próxima legislatura, Semilla se convertirá en la banca oficial y tendrá 23 diputados. VAMOS será el bloque mayoritario con 39, le sigue la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) -aliados de VAMOS- con 28.

Cristian Álvarez, diputado reelecto de CREO, señala que los aliados están confiados:

Hay paz en VAMOS, la UNE y algunos que se van a pegar con ellos para estar en la Directiva, porque ¿quién podría romper esa tranquilidad el partido de gobierno? Anda en otros temas en lugar de andar buscando acuerdos políticos importantes y hasta que no se activen, no le van a mover las aguas a los otros. Si el presidente electo ya tuviera acuerdos sanos con 80 o 90 diputados ya no habría que decir. Ahí hay una ventana para este grupo fuerte de oposición.  

Mario Taracena, expresidente del Congreso, ve cuesta arriba la llegada de SEMILLA a la Directiva pues esos espacios se conquistan solo con negocios oscuros: “lo que implica es que no tienen ninguna posibilidad de estar en JD, para estar ahí hay que facilitar los trances y yo he tenido la oportunidad de hablar con ellos -SEMILLA- y son gente sana con sus ideales”.

En cambio, dice, hay otra dinámica con los aliados:  cuando usted les habla de programas, no les interesa; a ellos le importa qué porcentaje hay y que gano.

La próxima legislatura tendrá 97 nuevos diputados y 63 reelectos. Y esto puede ser una oportunidad para el partido. Samuel Pérez, diputado de SEMILLA, no descarta que su grupo busque plazas en la directiva, no obstante:

 La JD, solo es una expresión de cómo se conforma una mayoría que define el tono del Congreso y nuestro objetivo será crear condiciones de gobernabilidad para hacer avanzar la agenda del Ejecutivo y eso definitivamente pasa por alianzas; eso no solo puede ser con diputaciones nuevas, sino quienes entendieron que ya no más prácticas de corrupción.

Pero ¿Cuál será la forma de negociar de la nueva bancada oficial?

No vamos a ceder ni un centímetro en términos de corrupción y eso va a cambiar la negociación. Ya no van a ser dinero por votos, sino agenda legislativa, llevar desarrollo a los departamentos, ejecutar políticas públicas.

Taracena cree que si Semilla no integra la directiva tendrá impacto:

No hay diputados de primera o segunda, pero hay una realidad política: los diputados del presidente son los diputados del presidente y eso pesa.

El diputado de SEMILLA asegura que platican con integrantes de varios bloques y que conforme pasen las semanas pueden concretar acuerdos. Los congresistas afirman que aunque ya empezaron pláticas, el trato se consolidará entre el 8 y 10 de enero.