¿Ha dejado USA de ser un referente?
Aquello no fue un debate político, sino un chabacano encuentro entre un megalómano narcisista y una extremista de izquierdas con muy poca capacidad para liderar una nación.
Publicado el 13 Sep 2024

La dinámica electoral norteamericana, más el “debate” Harris/Trump de esta semana, exponen un ambiente preocupante en el Norte. Hasta hace poco, la capacidad de los candidatos, tanto republicanos como demócratas -independientemente de la preferencia- era notoria, e incluso personas outsider de la política contaban con calidad suficiente para verlos y escucharlos. Todo eso, sin embargo, cambio hace unos años, y parece agravarse con el tiempo.

Cuando el único encuentro televisado -presumiblemente- entre los dos aspirantes a la Casa Blanca pasa por insistir en que algunos migrantes comen gatos o que hay que dar oportunidades para que se pueda seguir asesinando a niños no nacidos, creo que tocaron fondo. Aquello no fue un debate político, sino un chabacano encuentro entre un megalómano narcisista y una extremista de izquierdas con muy poca capacidad para liderar una nación.

Los ciudadanos norteamericanos están entendiendo -a palo y fuego- lo que ha venido ocurriendo en la mayor parte del continente americano: la elección entre dos indeseables en los que siempre hay uno menos malo que otro, aunque los dos lo sean. En el caso norteamericano, un medio de comunicación resumió el resultado del cacareado debate: Harris obtuvo una “C” y Trump una “C-“, lo que significa que la mediocridad fue lo que imperó en aquel encuentro. Los optimistas que dicen que Harris gano a Trump, parecen no percibir lo que ocurrió realmente: el país perdió un espacio precioso para exponer temas de altura, utilizar el sarcasmo expositivo y mostrar el respeto deseable, pero nada de eso ocurrió. Me da que estamos a las puertas de la caída “de una civilización” y que al igual que aquel tumbe del muro de Berlín no nos daremos cuenta hasta que todo esté consumado ¡Ven Huntington!

Es posible que estemos mejor con uno de los dos que con el otro, de eso no me cabe la menor duda porque entre dos siempre hay alguien peor, pero tengo claro que tanto el territorio norteamericano como el mundo, y particularmente la región, sentirán los efectos de cualquiera de los dos, por su mediocridad y extremismo. Si uno jala para un lado del radicalismo no hay que cerrar los ojos para ver idéntica fuerza en la dirección del radicalismo contrario. Una suerte de par de fuerzas contrapuestas que no generan resultados óptimos para el sistema político, y lo acelera. El intento de asesinato de Trump no debe de dejarse al margen en este análisis porque muestra una polarización y una agenda de violencia que no es descartable, aunque se obvió en el debate.

Pueden salvarse los USA -aunque no se si seguirá siendo verdad esta afirmación- por su sólido sistema institucional que hasta la fecha ha servido para recomponer ciertos entuertos presidenciales. De momento hay un empate técnico y el furor Harris solo ha servido para llenar páginas de prensa y boletines de noticias, aunque no se hay reflejado en las encuestas más allá de cambiar el porcentaje a favor de una respecto del otro, aunque en la misma dimensión en la que estaba antes: empatado

Las elecciones se ganan o pierde por detalles que suelen presentarse en esas semanas previas a la votación. En este momento quedan una seis y seguramente habrá mucho por ver, e incluso se sentirá la presencia china y rusa en el ambiente, como ha venido siendo habitual.

Los dos parridos mayoritarios deben de hacer una profunda catarsis y recomponer sus filas, si desean seguir siendo referentes en el mundo o predominar el cambio progresista que hunde a muchos partidos en Europa en pro de una forma política de ser que no soportará las nuevas generaciones de votantes. Se siente un cambio de época pero no necesariamente para mejor, aunque eso puede ser la percepción del conservadurismo que me inunda, sin despreciar la experiencia vivida que también forma parte del análisis de escenarios. Si fuera norteamericano me preocuparía mucho de la situación, pero sin serlo también me surge el temor de una China dictatorial liderando el mundo y sin que el tradicional liderazgo occidental esté presente. De la Unión Europea ni hablo, se acomodaron en el pacifismo relajante  y está siendo literalmente invadida por quienes la pondrán de rodillas en pocas décadas. Advierto que escribo esto un 9/11 no se si el karma tiene algo que ver o el hada de la coincidencia ha tenido a bien visitarme hoy.

www.miradorprensa@gmail.com 

Pedro Trujillo
Pedro Trujillo

Socio fundador de ConCriterio, S.A., empresa de generación de contenidos periodísticos. Profesor universitario y conductor de radio y TV

Sobre Pedro Trujillo

Socio fundador de ConCriterio, S.A., empresa de generación de contenidos periodísticos. Profesor universitario y conductor de radio y TV