Veinticinco días han pasado desde el domingo 27 de agosto cuando apenas salía el sol en Guatemala y a través de un vídeo difundido a través del canal de Gobierno, el presidente Jimmy Morales expulsó del país al comisionado del CICIG, Iván Velásquez.
Desde ese día el mandatario está ausente y pasó a ser un presidente de pantalla: son pocas sus actividades públicas, acude a las reuniones de gabinetes pero siempre se aleja de la Prensa.
Sus comunicaciones son a través de Facebook, Tuiter, comunicados de prensa y videos pregrabados, los cuales se difunden en el canal de gobierno. Esto solo demuestra que trata de protegerse, asegura el excanciller Fernando Carrera
“El presidente está tratando de protegerse de los medios, tiene interpretación de que los medios tergiversan la información y en esta coyuntura de crisis política quiere minimizar los riesgos de ser mal interpretado. El quiere cambiar lo que está haciendo la CICIG y el MP y como sabe que esa posición es impopular, no quiere exponerse a dar su opinión, está jugando una posición de protección política”
Carrera considera que la falta de exposición puede generarle al mandatario costos personales y políticos. El daño a su imagen es irreversible, dijo, y con insistir en Naciones Unidas sobre una revisión de la Comisión Internacional solo agravó su posición.
“Confirmo mi decisión plena de declarar persona non grata al señor Iván Velásquez Gómez en su calidad de comisionado de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG)”
Esa decisión presidencial desencadenó la peor de las crisis de su administración. Ese mismo día la ministra de salud, Lucrecia Hernández Mack junto con su equipo de viceministros renunciaron al cargo. Antes había sido destituido el canciller Carlos Raúl Morales. El martes pasado los ministros de Finanzas, Gobernación y Trabajo dimitieron.
La arengas del pasado miércoles durante el paro nacional 20s exigían el antejucio y la renuncia del presidente.
La exsecretaria de Planificación y Programación de la Presidencia, Karin Slowing, considera que la ausencia del mandatario es una estrategia del ejecutivo para reducir la vulnerabilidad.
“Ausencia de presidente hemos tenido siempre, especialmente en los últimos meses, creo que esa ausencia empezó antes del fatídico día en que declaró persona non grata a Iván Velásquez, es una estrategia para aumentar sus probabilidades de mantenerse”
Según Slowing solo un acto lograría revertir la imagen de Morales
“Es que el aceptara perder su inmunidad para someterse a investigación y que se demuestre si es libre de culpa”
Adela de Torrebiarte, excandidata presidencial
«La ausencia debilita también, eso va dejando un vacío, uno cuando está en un cargo tiene que comunicar, sobre todo cuando con los momento tan críticos que hemos estado viviendo»
Mientras tanto avanza en los tribunales el juicio contra su hijo, José Manuel Morales, y su hermano, Sammy Morales, acusados por el Ministerio Público y la CICIG, de fraude y lavado de dinero. El tribunal décimo tercero ya arrancó con la revisión de peritajes de la Comisión Internacional.
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