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El país registra 5.7 millones de vehículos y el 47% circula en el departamento de Guatemala, según los reportes de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) hasta 2024. Hay conductores, en municipios vecinos, que pasan entre 5 y 6 horas diarias para salir y volver a casa. La hora pico se adelantó, nos cuenta Viviana Sánchez, una humanista de 40 años, que vive en la zona 18 y trabaja en la zona 10 de la capital:
Antes, normalmente empezaba a las 5 o 5:30 de la mañana, ahora desde las 4:30; y en las tardes empieza de las 5:30 a las 8:00pm en la ruta a San Pedro Ayampuc.
Hace 9 años Sánchez compró un apartamento en el límite de la zona 18 y San Pedro Ayampuc, un gancho de la publicidad de la inmobiliaria era una vía rápida que conectaría con el centro de la ciudad. Pasaron los años y el tráfico solo se agravó; ella usa el transporte público y el año pasado tomó una decisión:
Sí yo salgo de la zona 18, tendría que salir a las 4:00am y tomar una camioneta extraurbana, que ya van llenas –casi que uno se viene en la puerta. Pero debido a que era bien complicado, a mediados del año pasado opté por irme a la casa de mi mamá porque eran más de 3.5 horas en el tráfico –solo de venida al trabajo. Salgo de mi casa el lunes con todas mis cosas para la semana y regreso a mi apartamento viernes en la noche o sábado temprano.
Desde la casa de su mamá, en la zona 6, ahorra 3 horas de tráfico diarias.
Luis Serrano, auxiliar contable de 24 años, vive en la colonia Fuentes del Valle 4 en la zona 18 y viaja en su carro hacia la zona 10 todos los días:
“Son 3 horas desde mi casa. Ahora son las 5:00 y ya está impasable. Cada día estamos paso 5 o 6 horas en el tráfico, 5 días a la semana: es estrés y estarte levantando más temprano. Antes me levantaba a las 6, después 5, ahora a las 4. Ya no se puede dormir más de 6 o 7 horas. Me ha afectado porque debo ir a estudiar a la San Carlos y, a veces, son las 10 de la noche y sigue el mismo tráfico”.
En los próximos días optará por un atajo que le ahorra 20 minutos, pero eso ya es un alivio: Ese extravío, es literalmente cruzar una montaña y me saca a Jocotales y al boulevard Cementos Progreso.
Carlos Álvarez, un vecino de la zona 1 de Villa Nueva, tiene dos opciones en la mañana: cualquiera implica 3 horas menos de sueño:
Si salgo a las 5 de la mañana de Villa Nueva, me hago hasta 3 horas para llegar a la zona 10 y llego justo o un poco tarde al trabajo; por lo tanto, he optado es salir a las 4.20 am y me hago unos 45 minutos. Vengo a estacionar a algunas de las calles para esperar 2.5 horas en lo que entro a trabajar; pero las dos opciones son complicadas: si bien estás dentro del carro, no es lo mismo que estés descansando en tu casa. El viernes ya llega uno con la mente tupida; no se rinde igual en el trabajo, repercute en la calidad de vida porque te resta varias horas de sueño al día.
Tráfico en Villa Nueva.
¿Dejaría de usar el carro si contara con el transporte adecuado? Sí, porque al final para transportarte en estas condiciones gastás Q1 Mil 500 mensuales y en transporte público, ese gasto puede reducirse a la mitad.
Los entrevistados, no obstante, son pesimistas: no ven un proyecto que alivie el tránsito. Como afirma Serrano: “al punto en el que estamos, suena imposible hacer algo”.
Por cada carro en la calle, hay una moto; también en cada accidente, hay una moto