Labymed S.A, es una compañía que vende productos médicos al Estado de Guatemala. Desde 2004, y hasta la fecha, sus contratos suman Q889.2 millones, solo en los primeros meses de 2020 obtuvo: Q27.5 millones.
En abril de este año ConCriterio publicó un reportaje en el que evidenció que esta compañía llegó al parque de la industria para donar de un lector de pruebas Covid-19 y salió con un contrato de Q2.2 millones en venta de pruebas para detectar el virus. Eran del ripo PCR y, se ofrecían a Q648 pero después del reportaje bajaron el precio a Q448.
Hoy la compañía, de acuerdo con un informe de Diálogos, una organización de investigación que busca soluciones a problemas públicos, se ubica en la cúspide de empresas con los contratos más onerosos que el Ministerio de Salud ha celebrado, por lo que parece ser que desde abril que entregó el donativo al gobierno se convirtió en la favorita. Su más reciente contrato es de Q23.7 millones por compra de 120 mil pruebas de antígeno o pruebas rápidas para detectar Covid-19.
Sofía Montenegro Investigadora Asociada de Diálogos, comenta:
“Estamos observando un comportamiento que se debe a la falta de capacidad de otras empresas para proveer del servicio. ¿Qué tanto se les está dando capacidad para que otros también participen y que puedan ser proveedores del Estado”.
¿Qué estaba pasando?
La investigadora recurre a un análisis del pasado sobre compra de combustibles en la PNC para plantear una hipótesis.
“Lo que sucedía era que en las bases del concurso se solicitaba que las empresas de combustibles tuvieran una sede en cada departamento. Y eso dice que las bases del concurso estaban diseñadas para favorecer a una empresa”
Diálogos en su informe, además, indica que muchos de los contratos de Labymed rondan los Q90mil aunque no se determinó si lo que se persigue es hacer compras fraccionadas.
Labymed obtuvo el contrato para proveer la pruebas rápidas lo que generó una controversia en redes ya que en Guatecompras -el portal de negocios del Estado- su competidor, Imexmed S.A, ofertó por Q3.4 millones, lo que hacía parecer que cada prueba de ellos costaba Q29, mientras que las adquiridas a Labymed lo eran a Q198.
Este reportero consultó con Carlos Solís, asesor del despacho legal de Imexmed, quien dijo:
“Solo ofertamos por 20 mil pruebas porque nuestro Registro General de Adquisiciones del Estado (RGAE). Nosotros solo lo tenemos precalificado para Q3.4 millones”
La confusión entonces radicó en:
“Alguien hizo un mal cálculo dividió los 3.4 millones por 120 pruebas, pero solo participamos por 20 pruebas”.
No obstante una simple operación matemática ubica a esta compañía con la oferta más barata: pues al hacer la multiplicación esta sería de Q 20.5 millones, Q3.2 millones menos de lo que ofertó Labymed.
Pero la empresa no calificó por algo más: una certificación para demostrar la eficiencia de la prueba. Sobre esto comenta Solis.
“El Ministerio de salud nos mandó a solicitar una validación de un ente competente en Guatemala, pero nosotros solo contamos con las europeas y asiáticas que es de donde viene el producto”.
Para esta nota ConCriterio solicitó una entrevista con Iñaki Altuna director ejecutivo de Labymed, quien a través de una asistente pidió enviar un correo, pero al cierre de la nota no hubo respuesta.