Una protesta se escuchó ayer en medio de la manifestación por la democracia, convocada y desarrollada por los pueblos indígenas y el presidente electo Bernardo Arévalo. En ella participaron miles de personas quienes rechazaron las acciones de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y Corte de Constitucionalidad (CC), y finalizaron frente al Ministerio Público, junto con el plantón que cumplió 67 días y que pide la renuncia de la Fiscal General, Consuelo Porras. Pero, la presencia de políticos como el excandidato presidencial Edmond Mulet y Roberto Arzú incomodaron a algunos manifestantes, quienes abuchearon al expresidenciable de CABAL:

¡Fuera Mulet, fuera Mulet!

Luis Pacheco, presidente de los 48 cantones pidió respeto y dio la bienvenida a Mulet: Sea bienvenido doctor Mulet, eso demuestra que es usted también es Guatemalteco; así quisiéramos que los alcaldes y diputados se sumen, porque al final de cuentas también estamos defendiendo que ellos también asuman al cargo.

Además, exhortó y animó: creo conveniente hacer una reflexión. Debemos unirnos, estamos en una lucha y necesitamos estar más fuerte que nunca y eso pedimos aquellas personas que estaban abucheando, ¡respeto por favor, es momento de sacar al pacto de corruptos!

El presidente electo también llamó a la calma y a la unión:

Guatemala es un país plural, lo cual es fuerte de su riqueza y a partir de la cual vamos a construir la unidad, que a pesar de nuestras diferencias nos hace tener claro que si no caminamos juntos nos van a robar la democracia, nos van a quitar la oportunidad, van a matar la esperanza y nos van a hundir en un ciclo de cientos de años de estafar al pueblo y robarnos el futuro. ¡ya no más!

Pese a los abucheos, Edmond Mulet tomó la palabra.

Mulet caminó en todo el recorrido a la par de Arévalo y entre los políticos que acuerparon la manifestación por la democracia, solo al excandidato presidencial se le permitió acceder a la tarima improvisada que fue la rampa de la CC. Además, Mulet fue el único que pudo dirigir la palabra a los asistentes, y su breve discurso fue poco perceptible porque los abucheos no pararon:

“Estamos con la voluntad popular, estamos por la democracia y  con el presidente y la vicepresidenta electa; estamos por el futuro de Guatemala”. Mulet fue el candidato presidencial que en su afán de ganar popularidad entre ciertos sectores emitió este mensaje cuando se le preguntó: ¿doctor va a traer a la CICIG?

-La CICIG es pasado, no vamos a revivir algo que ya pasó, pero sí vamos a combatir la corrupción que es un flagelo que está destruyendo a Guatemala.

Edmond Mulet on Twitter: «Nunca más la CICIG en #Guatemala. pic.twitter.com/NoVQma86l8 / Twitter»

Nunca más la CICIG en #Guatemala. pic.twitter.com/NoVQma86l8

En su discurso de ayer Mulet dijo que el pacto de corruptos no quiere respetar la democracia y que quiere traerse abajo todo el proceso electoral.

Karin Herrara, vicepresidenta electa, señaló que la invitación fue abierta a quien se quisiera sumar a la defensa de la democracia y negó que los políticos que los acompañaron vayan a formar parte del gobierno.

Roberto Alejos, expresidente del Congreso:

Hay que estar bien conscientes que la población no entiende eso y que así como votó por Bernardo y Karin, en contra de la política tradicional, va a seguir pidiendo que estos no sean parte del gobierno y cuando los ven en una manifestación eso es lo que piensan y explicarles que se trata de hacer alianzas objetivas basadas en programas y compromisos de lucha contra la corrupción, es difícil porque la gente ya no cree en nada. Y lo que pasó – los abucheos- es que estos pagaron la mala imagen de la clase política, sin embargo fue bueno que llegarán y ojalá más gente se sume.

Alejos señala que si bien Arévalo tiene que hacer las alianzas, debe tener cuidado porque el resto de políticos no están bien vistos. darle las gracias desde arriba, los enfocan y hubiera quedado mejor que estar ahí a la par tratando de aparentar que son parte del equipo. Lo que pasa es que en política la forma es el fondo.

No obstante, el expresidente del Congreso advierte: “si no hace alianzas no va a gobernar, pero tiene que saber hacerla: ese es el arte, la ciencia de hacer política”.

En las pasadas elecciones Arévalo logró repuntar cuando expuso la corrupción de sus contrincantes, incluyendo a Mulet, y ganó la presidencia, en segunda vuelta, con 2.4 millones de votos; el 60% de sufragios emitidos.