A pesar de las constantes quejas de ciudadanos por falta de agua entubada, inundaciones, atascos viales y una solicitud de retiro de inmunidad bajo sospechas de corrupción, Ricardo Quiñónez llegó a la sede del partido Unionista en la zona 9 aquella madrugada de junio de 2019. Los cohetillos y bombos tronaron a su ingreso cuando sus simpatizantes celebraron que ganó la alcaldía. Un escenario que, según sus opositores, puede repetirse a pesar de que el descontento crece, pero no lo suficiente para concluir con la era de Álvaro Arzú. Esta solo podrá ser reemplazada con una “nueva propuesta”.
Como concejal primero, Quiñónez asumió la alcaldía para terminar el periodo cuando falleció el exalcalde Arzú, quien estuvo al frente de la municipalidad desde 2003 hasta 2018. Para los críticos de esta administración, con la imágen de alcalde Arzú se endosaron hacia Quiñónez en 2019: 141 mil 495 votos, 9% sobre el eterno contrincante Roberto Gonzáles, quien ha buscado la alcaldía en tres ocasiones y es el único que más se acercado al puesto.
Una encuesta de la firma Quanty Research, especializada en monitorear los hábitos de espectadores de televisión y radio, compartida por el partido de oposición Semilla y efectuada entre el 1 y 9 de agosto del presente año a 1,650 capitalinos, reflejó que 46% aprueba el trabajo del alcalde Quiñonez. El 61% dijo no saber por quién votar; el 16% dijo que por ninguno de ellos y el 2% darían su voto a otros candidatos como Álvaro Véliz del partido Semilla y Luis Enrique Cruz (Veneno) quien se postuló en el 2015 con el partido Visión con Valores (VIVA).
“Si bien ha tenido cosas positivas como la apertura y firma de convenios con otros gobiernos municipales, especialmente en transporte público, el tema no se ha solucionado, así como tampoco la falta de agua entubada y los atascos viales. Son situaciones que persisten después de 20 años”, dice Lily Caravantes, concejal décimo de la comuna en representación del partido Semilla, quien apuesta no solo por un nuevo candidato, sino por un trabajo conjunto.
«¿Cómo pronosticar el fin de un periodo? solo con una excelente propuesta o con una articulación de todas las fuerzas progresistas. El hecho de que en una encuesta salga con una aceptación del 48 por ciento quiere decir que una mayoría no lo acepta y eso pone un desafío para Quiñónez, pero también para otras propuestas. Creo que hace falta mucho fortalecer el concejo municipal para la toma de decisiones trascendentales porque no solo el alcalde dirige la municipalidad».
Este año afloró el malestar por las condiciones como trabaja el personal de la comuna, es el caso de dos trabajadores de la Empresa Municipal de Agua (Empagua) que fallecieron al revisar un colector dañado en el bulevar Los Próceres zona 10 sin el equipo de protección necesario.
El 10 de agosto, trabajadores de la Policía Municipal de Tránsito, Empagua y Transmetro protestaron frente al edificio municipal para denunciar violaciones a sus derechos laborales por no contar con el pago de horas extras e incluso denunciaron corrupción en la comuna.
Para Francisco Cermeño, miembro del sindicato de trabajadores de Empagua, la manifestación solo refleja el descontento.
«Quiñónez ganó las elecciones por unos ocho mil 500 votos los empleados municipales directos e indirectos somos 13 mil y entonces estamos convencidos que se sienten amenazados porque no han hecho las cosas bien. El apoyo que antes existía con Álvaro Arzú ya no existe, muchos pensamos que habría un cambio en la línea laboral pero no fue así, Arzú al menos te respetaba y trataba de solucionar y evitar conflictos, pero ahora no tienen capacidad de negociar».
ConCriterio consultó al alcalde Quiñónez sobre su la crítica de sus opositores, pero no respondió las llamadas ni mensajes de texto. Integrantes del partido Unionista afirman que están en el proceso de alianza con el partido Valor y decidirán si Quiñónez será el aspirante para la alcaldía, aunque adelantaron que dentro del partido Unionista “no se baraja ninguna otra opción”, puesto que, según sus propias encuestas, la ciudadanía está contenta con su trabajo. No aceptaron hacer públicos esos resultados.
“Las protestas y las inconformidades son una señal de que estamos viviendo los últimos días de esta administración”, dice Richard Lee, concejal sexto en representación del partido Creo.
«Algunos todavía cuentan que tienen miedo, pero cada vez son menos y ya se atreven a decir que es lo que está pasando allí dentro. La gente lo que pide es un modelo de gestión cercano al vecino, que escuche a la gente».
En enero de 2021 la Cámara de Amparo y Antejuicio de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) rechazó la solicitud de antejuicio para Quiñonez. El Ministerio Público (MP) sospechaba financiamiento electoral ilíicto con fondos municipales al Partido Unionista entre 2011 y 2015.