Entre empujones y desorden: así llegó Sandra Torres, excandidata presidencial de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), a los tribunales el día de su captura el 02 de septiembre, señalada de financiamiento electoral no reportado y asociación ilícita.  A su llegada a los tribunales, una veintena de periodistas le esperaban: querían captar el momento cuando la exprimera dama se encaminaba al juzgado.

La expresidenciable se cubrió el rostro con una manta oscura y gafas negras:  escondía los grilletes y ocultó su rostro.

Margarita Castillo, exdirectora del sistema penitenciario, dice que el desorden es resultado de la ausencia de un protocolo que corresponde a tres instancias: Penitenciaría, Organismo Judicial y también la prensa.

Sin lugar a duda los periodistas querrán tener la información de la condición de los privados de libertad, pero también estas personas deben de sentirse agredidas y vulnerables frente al “acoso” de los medios de comunicación. Por lo que es importante que se diseñe un protocolo en donde quede establecido las medidas y procedimientos en donde no se niegue a la prensa el acceso a la información y se respete el derecho de estas personas -los procesados-.

Amparo Lotán, exrepresentante de los trabajadores en la Junta Directiva del Seguro Social, absuelta de los señalamientos del Ministerio Público en un caso de corrupción en la entidad, cuenta su experiencia cuando en mayo de 2015 fue capturada y conducida a los tribunales:

Considero que fui violentada en mi derecho a mi dignidad. En ese momento yo estaba en shock por lo que estaba ocurriendo y a eso se sumó la exposición mediática y creo que los medios de comunicación deben de reflexionar mucho en esto.

Salvador Gándara, exministro de Gobernación durante el gobierno de la UNE, condenado a cuatro años de prisión domiciliar por un caso de fraude en las prisiones y sindicado en el caso Transurbano, opina que esta situación se genera porque son políticos quienes están en el centro de atención de la prensa:

Yo creería que lo más importante es que exista espacios adecuados para la prensa y procesados: ustedes -la prensa- con todo el derecho que tienen de informar y nosotros tener un lugar para declarar de una manera más humana y ordenada.

Cesar Calderón, abogado del expresidente Otto Pérez,  es crítico de la prensa, cuando apunta que en otros países el trabajo se hace con reglas y procedimientos de seguridad:

Se pone en peligro la vida de las personas con todos los periodistas que llegan a cubrir las audiencias de los procesados. Me ha tocado vivir muchos momentos difíciles por la envestida de todos los medios de comunicación. Esto tiene que ver con la educación, yo he estado en otros países y la seguridad le ordena al periodista y el reportero obedece.

Los entrevistados concluyen además que la infraestructura de salas y edificio de tribunales contribuiría a crear un ambiente más ordenado.