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La municipalidad de La Antigua Guatemala está por aprobar un contrato por Q47.7 millones para comprar 20 buses eléctricos e implementar un servicio de transporte local que desincentive el uso del vehículo en la ciudad colonial. El proveedor único es Comunicaciones Servicios y Sistemas, cuyo propietario es Roberto Sosa Mendizábal, quien alquila 30 buses entre Guatemala, Santa Catarina Pinula, Ciudad Vieja y la propia Antigua, donde busca ampliar el servicio.

Byron Benítez, integrante del Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode) como representante de la gremial de mototaxis en Antigua, cuestiona: ¿Por qué quiere invertir tanto en un arrendamiento? Es un gasto más que un ingreso. ¿Cuál es el beneficio para la comunidad?

Felipe Hernández, jefe de Movilidad de la comuna: Las instituciones lo que comúnmente hacen es que adquieren los buses y luego no se les da mantenimiento por las ineficiencias del presupuesto de la institución. Nosotros lo que queremos es asegurar un servicio de primera y no estar cotizando mantenimiento, seguros, gasolina… 

Además, señala: Esos buses están costando en el mercado alrededor de Q.1.5 millones (cada uno). 

Si se concreta el contrato, la implementación del servicio iniciará en febrero de 2025 y finalizará en enero 2028. Según Sosa Mendizábal, único oferente: Incluye los seguros, el mantenimiento por tres años, sistema prepago y financiamiento.  También las estaciones de carga están incluidas dentro del proyecto  e incluso está incluida la energía eléctrica que se va a gastar en los 36 meses de servicio.

Las unidades podrán recorrer hasta 300 kilómetros con una sola carga. Se estima que mensualmente la factura de energía rondará los Q55 mil. 

Al concluir el contrato, la municipalidad podrá comprar los buses: “un dólar a los 36 meses”, señala Sosa Mendizábal.

El 06 de agosto de este año, el director Financiero y jefe de Presupuesto de la municipalidad de La Antigua Guatemala concluyeron que para este año “no se tiene disponibilidad presupuestaria”. El jefe de Movilidad nos dice: según las normas presupuestarias, sí tenemos que tener cierto presupuesto para justificar la firma del alcalde y para eso se asignaron Q100 mil”.

El proyecto encuentra oposición de grupos afectados como las gremiales de transportistas, operadores de restaurantes y vecinos. Benítez como mototaxista durante 20 años reprocha:  la inconformidad es porque la municipalidad no se reunió con ninguno de los sectores para planificar y hacerlo de manera conjunta.

Según él, la semana pasada tenían en agenda una reunión con el alcalde Asturias, pero se canceló. ConCriterio intentó obtener la postura de la Cámara de Turismo, pero no respondieron. 

Nidia Campos, cofundadora de la gremial de restaurantes de La Antigua, señala que no se oponen, pero existen otras urgencias:  Hay falta de agua potable, drenajes, banquetas; sí cuestionamos desde lo privado qué importa más. El transporte ¿es necesario? Sí. Si nos vamos a garantías constitucionales qué es lo que urge más en el diario vivir de un vecino: ¿agua potable o transporte público?

Les vecinos señalan, además, las deficiencias del alcantarillado y remiten a los recientes videos de una Antigua anegada, tras las lluvias del fin de semana.  “De nada sirve que la ciudad tenga buses hermosos, si cuando llueve no funcionan los drenajes”.  

Y a la pregunta si estos buses podrán circular en las correntadas de agua, el potencial proveedor: “Una inundación como esas, definitivamente no vamos a circular, pero los buses vienen con todos los seguros del caso para evitar contingencia”.  

El director de movilidad municipal aclara que no se afectan otros proyectos:  “no afecta las arcas municipales porque el dinero saldría a través del servicio que va a prestar”.

Algunas ciudades que han implementado servicios similares son Guanajuato, San Miguel de Allende  y la propia ciudad de México.