Reconocimiento facial en el Estado: que cobre quien es y no quien no trabaja
"Me parece una medida revolucionaria para efectos de la administración pública. Se estandariza el control del personal, viene y crea un orden que se necesitaba. Si hay alguna persona que prestaba su nombre, pero no era la persona que estaba en el trabajo, el fondo es el control de las nóminas ya que cada vez en más frecuentes de personas que cobran, pero no están".
Publicado el 11 Dic 2024

Reconocimiento facial en el Estado: que cobre quien es y no quien no trabaja

"Me parece una medida revolucionaria para efectos de la administración pública. Se estandariza el control del personal, viene y crea un orden que se necesitaba. Si hay alguna persona que prestaba su nombre, pero no era la persona que estaba en el trabajo, el fondo es el control de las nóminas ya que cada vez en más frecuentes de personas que cobran, pero no están".

Escuche la nota aquí:

 

La Contraloría General de Cuentas (CGC) estima que en promedio medio millón de personas están sujetas a la fiscalización en Guatemala por el manejo de fondos públicos: trabajadores del gobierno central, entidades autónomas y descentralizadas y Organizaciones No Gubernamentales (ONG), entre otras.

Con una nueva disposición todos ellos deberán actualizar y validar sus datos mediante un sistema de reconocimiento facial, según lo dispusieron las autoridades del órgano contralor. Cada persona deberá escanear su rostro desde una aplicación y el plazo para cumplimentar este requisito será diciembre de 2025. José María Vásquez, asesor del despacho superior de la Contraloría, nos dice que en una primera fase hay ya 6 mil 300 personas registradas bajo este mecanismo. El programa, a la vez, válida datos con el Registro Nacional de las Personas (RENAP) para comprobar la información.

El funcionario enfatiza en uno de los principales propósitos:

Tener la certeza de que la persona es quien dice que es.

El asesor señala que esta tecnología la han implementado para dar seguimiento a diversos proyectos. Por ejemplo, nos cuenta que de forma aleatoria se han seleccionado ciertas escuelas a donde se envían monitores y se han llevado algunas sorpresas:

En esta visita yo puedo tener 3 consultas: verificar a la persona, instalaciones o si tienen materiales. Hagamos de cuenta que es para ver si está la persona, el monitor va con una tablet y le hace el reconocimiento facial al maestro, la aplicación le devuelve la información de la persona que está en el salón de clases. Nos hemos topado que hay maestros andan en EE. UU y dejan a un suplente. Ahora ya no van a poder hacer eso.

También lo hacen para verificar el cumplimiento de los avances en los proyectos de obra gris: cada obra tiene un supervisor y él va a reportar los avances. Nosotros sistematizamos ese proceso y mediante una aplicación se puede informar cómo va la obra, pero nos dimos cuenta de que no eran los supervisores lo que llegaban al lugar, nuestra sorpresa fue que él mandaba a otra persona.

Ahora la aplicación solo permite actuar con el reporte de avances, toda vez el supervisor realice el reconocimiento facial y el sistema compruebe que es él quien está en el sitio de la construcción.

Fredy Gómez, director de Cardinal, empresa de análisis de datos, reacciona:

Me parece una medida revolucionaria para efectos de la administración pública. Se estandariza el control del personal, viene y crea un orden que se necesitaba. Si hay alguna persona que prestaba su nombre, pero no era la persona que estaba en el trabajo, el fondo es el control de las nóminas ya que cada vez en más frecuentes de personas que cobran, pero no están. Puede ir cerrando la puerta a las plazas fantasma, pero hay criminales que hecha la tecnología buscan la manera jugarle la vuelta.

En 2017 bajo la presidencia de Jimmy Morales, la Unión Europea financió con Q5.3 millones un censo de funcionarios: 85 instituciones de al menos 500 entidades fueron analizadas y se contaron 262 mil 700 trabajadores, el 64% en cargos fijos y el 34% en puestos temporales; el 78% gana entre Q3 mil y Q 10 Mil.

Una vez concluido el censo de trabajadores públicos: ¿para qué nos servirá?

Henry Bin

Periodista

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