Hoy la sociedad está más consciente de la necesidad de cambiar hábitos para cuidar el medio ambiente. En el país cada vez más compañías, universidades y colegios están enfocados en la dinámica de responsabilidad hacia una cultura verde. En 2016 la municipalidad de San Pedro la Laguna, Sololá, se convirtió en la primera entidad pública que abiertamente le declaró la guerra a la contaminación ambiental en el municipio.
Mauricio Méndez, jefe edil del lugar, conocido como el alcalde 111, firmó el en septiembre de 2016 el acuerdo municipal 111-2016 mediante el cual quedó prohibido el uso, comercialización y distribución de bolsas plásticas, pajillas y duroport. Hacia 2018 ya se sumaron Cantel, Quetzaltenango, Acatenango, Chimaltenango y el 27 de abril de este año la municipalidad de San Miguel Petapa.
Ser amigables con el ambiente no ha sido fácil el tema ha generado una serie de discusiones y oposiciones de distintos sectores, explica Méndez.
“nos divorciamos sin habernos conocido”, dijo el alcalde de San Pedro la Laguna al referirse a como tomaron los empresarios productores de plástico la medidas. Al principio se creyó que era la prohibición de todo tipo de plástico: ahora ellos han apoyado y han entendido que no son las envolturas de los productos, sino que es la bolsa común que anda en el mercado y que tanto daño hace.
A casi dos años de la medida, el jefe edil considera que los resultados, no son suficiente. Aunque hay una inversión:
Estamos teniendo como eje principal la parte ambiental, que mejora la salud, la calidad de vida y así mantenemos la industria del turismo también.
Erick Pancoj, dependiente de farmacia en ese destino turístico comenta:
“En algunos negocios ha sido difícil la adaptación, más cuando venden productos pesados, entonces se tiene un poco de dificultad, tampoco el cien por ciento ha cumplido, lo que están haciendo algunos es que están comprando bolsas que se degradan más rápido”
Juan Carlos Tefel, Presidente de la Cámara de la Industria, considera que las medidas implementadas por las comunas tienen buena intención; pero él considera que no son la solución al problema:
Lo manejan de forma superficial, ya que según estudios, menos del 2% de la basura son las bolsas plásticas no reusables, entonces el problema real no se está atacando, lo que necesitamos es una ley de desechos sólidos mediante la cual las municipalidades se responsabilicen de recolectar la basura y las personas botar la basura en su lugar, pagar por esa recolección de basura y tenemos que ser responsables de la basura que generamos tanto en lo individual como en lo empresarial.
En el Congreso de la República avanza en primer debate la iniciativa del diputado Felipe Alejos, que busca regular del uso y comercialización de las bolsas plásticas en la cual se contemplan multas Q10 mil a Q50 mil y cancelación de la licencia sanitaria o patente de comercio, para los infractores.
Tefel considera que es una iniciativa populista: ya que si tuvieran verdadero interés de no tener contaminación entraría a trabajar la ley de desechos sólidos, pero no ha sido así.