La tragedia del volcán de Fuego descubrió la vulnerabilidad de los humanos ante la fuerza de naturaleza, pero también expuso la urgencia de elaboración de planes de prevención y la atención de los protocolos de emergencia.
Estos últimos pueden marcar la diferencia. Las muertes pueden evitarse, dicen los expertos, si las autoridades reaccionan y evacúan a las poblaciones que hoy han desaparecido bajo toneladas de arena volcánica.
San Juan San Miguel Los Lotes y El Rodeo fueron las comunidades en donde el número de muertos aún es incierto. Las personas que se salvaron no estaban ese día en casa: Andábamos trabajando ya cuando regresamos ya había ocurrido. Es Rony Rocael un hombre de 37 años, en la tragedia perdió a su hija de 18 y a un nieto que justo iba a nacer ayer.
Odilia Ortiz de 30 años, su esposo y sus 4 hijos están con vida ya que ese día decidieron visitar familiares en otra zona.
“Nosotros fuimos de visita donde mi papá, mucha gente de paseo como se acostumbra los domingos, pero la mayor parte de la gente ahí murió”
Los sobrevivientes afirman que no se activó ningún plan de evacuación hasta que el peligro ya estaba sobre los poblados, las personas del lugar creían que los retumbos y caída de ceniza era actividad normal del coloso. Nadie les dijo que esta vez su vida estaba bajo riesgo.
Todo lo contrario ocurrió en el club de golf La Reunión, ubicado en Alotenango, Sacatepéquez Ese domingo en el complejo hotelero se encontraba la periodista Rocío Lazo quien relató a ConCriterio que la evacuación se efectuó a las 12:58 hrs., duró entre 10 y 15 minutos, ella fue de las ultimas en dejar La Reunión:
La actuación de La Reunión si fue inmediata. Ellos ya estaban preparados con un plan de evacuación, lo que hicieron fuer reunir a todo su personal primero, luego nos empezaron a decir que saliéramos del lugar, que se trataba de una evacuación de emergencia y cuando yo iba saliendo que fui de las últimas, vi un pickup con unos 20 trabajadores. Fueron súper estrictos, ¡ya por último dijeron por favor se van ya!
Y aunque ellos iban huyendo del peligro, los pobladores desconocían de la magnitud de la actividad del volcán y el relato de Lazo lo confirma: Algo que vi fue la ayuda de la gente, íbamos la gente en el camino nos lanzaba agua al carro para que la ceniza no nos obstruyera la vista. Sin duda creyeron que era algo normal y solo trataban de ayudar a los visitantes.
María José Asensio había estado otras veces en La Reunión, pero ese día los sonidos del volcán decían algo diferente: era como el sonido del mar. Algo le dijo que debía marcharse y de inmediato, su esposo, sus tres hijos y la empleada, se retiraron: yo vi venir el peligro así que decidimos evacuar inmediatamente.
La Reunión parece hoy una casa fantasma, las imágenes circularon en redes sociales y luego de verlas, Rocío Lazo reaccionó: ¡Terrible, se me partió el corazón porque al final es inversión, unos arquitectos me contaban que uno de sus clientes recién compraron un terreno en el área y estaban ya en el diseño de la construcción, me duele a nivel de la gente que había invertido tanto.
La tragedia no distingue posición social. Rony Rocael recién había terminado de pagar el terreno donde vivía, en la aldea Los Lotes.
“A nosotros en total el terreno nos lo dieron en Q35 mil, por pagos, Nos quedamos en la calle porque todo se perdió.
En la misma comunidad hace tan solo un año, Odilia Ortiz y su esposo habían terminado la construcción de su pequeña casa.
«Duele porque con cuanto sacrificio íbamos haciendo nuestras cosas».