Un sistema de baja presión que se formó en las costas de Venezuela apunta su recorrido al caribe de Nicaragua y el Atlántico de Honduras. Si sigue su trayecto, tocará las costas guatemaltecas el próximo lunes y los pronósticos alertan a que 11 departamentos serán los más vulnerables advierte la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) y el Instituto Nacional de Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh).

El director del INSIVUMEH, Wilson García, afirmó que existe un “análisis certero de cuáles serán las condiciones en los próximos días a causa de este ciclón tropical” y, según él, impactará en el territorio guatemalteco.

«Podemos ver la trayectoria que se va convertir en huracán en una parte de Centroamérica. Prevemos que cuando llegue a Guatemala se degrade de tormenta a depresión tropical. El inconveniente no es tanto el impacto en el viento, sino en la precipitación, vamos a tener una gran precipitación en el territorio, más lluvia».

Hasta este jueves, existía un 60 por ciento de probabilidades de que este fenómeno continúe su trayectoria hacia Centroamérica, explica el meteorólogo del Insivumeh, César George.

«Algunos modelos de pronóstico apuntan a que será como la tormenta Bonnie que va en dirección entre las costas de Nicaragua y Costa Rica; otros modelos apuntan a la parte atlántica de Honduras y es cuando más se acercará al caribe de Guatemala. Si sus vientos pasan de los 63 kilómetros por hora ya es una tormenta tropical donde adquiere un nombre; si alcanza vientos cerca de los 118 kilómetros, podría ser un huracán».

En julio último, cinco personas murieron por las severas lluvias que dejó la tormenta tropical Bonnie a su paso por Centroamérica. Cuatro en Nicaragua y una en El Salvador.

A pesar de los días soleados o con vientos de fin de año percibidos en las dos últimas semanas, la temporada de huracanes no concluirá sino hasta el 30 de noviembre, dice el meteorólogo. Esto se debe a que, por segundo año consecutivo, los patrones climáticos están fuertemente influenciados por un fenómeno natural conocido como La Niña.

En la primera quincena de noviembre de 2020 se registraron las tormentas Eta e Iota que dejaron 60 personas fallecidas, 30 heridas y 100 desaparecidas, según los datos oficiales de la Conred. Las inundaciones por esos fenómenos dejaron  2.4 millones de personas afectadas y 1.7 millones damnificadas. Los departamentos más afectados fueron Alta Verapaz, Huehuetenango, Quiché, Petén, Izabal, Zacapa y Chiquimula.

Rodolfo Flores, vocero de la Conred, afirma que ante el fenómeno meteorológico que se aproxima iniciaron reuniones con representantes de los ministerios de Comunicaciones y Defensa para establecer acciones con los gobernadores y alcaldes de los departamentos que serían los más afectados.

«Hay probabilidades altas de los departamentos que serán más afectados por su ubicación, estos son Alta Verapaz, Chiquimula, Huehuetenango, Izabal, Jutiapa, Quiché, Retalhuleu, Zacapa, Sacatepéquez y con probabilidad alta Escuintla y Santa Rosa».

En el tema de carreteras el ministro de Comunicaciones, Javier Maldonado aseguró en una conferencia de prensa que están preparados con 240 frentes para quitar cualquier obstáculo de las vías.

«Hay que ser un poco objetivos. La red vial nunca ha estado en situación como para enfrentar una tormenta o un ciclón. Un deslizamiento, un socavamiento o derrumbe no es tema de la red vial, es tema de la sobresaturación de suelos que no importa qué buena capacidad tenga un material, que con una sobresaturación de agua se crean deslizamientos».

Este año la Conred reporta 13 carreteras destruidas y 670 afectadas a raíz de las lluvias; 3 mil 200 personas han sido albergadas debido a las inundaciones que afectaron sus viviendas, de ellas 400 permanecen en 13 albergues.