El Congreso de la República ha retomado una antigua lucha ideológica con Jordán Rodas Andrade, Procurador de Derechos Humanos, elegido en julio 2017 con una mayoría aplastante: consiguió el voto de 131 diputados de 158.
Rodas contaba con simpatía, pero con el correr del tiempo, sus acciones desagradaron a ciertos grupos en el Organismo Legislativo. Los congresistas le reprochan, en especial, su defensa a favor de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG). El magistrado de consciencia gano una batalla en la pasada legislatura, pero la guerra no ha terminado. Hoy aquel movimiento para desaforarlo toma un segundo aire.
Diez bancadas en el Congreso de la República alzaron la mano el martes para que Rodas acuda al pleno del Congreso en donde planean despojarlo del cargo. Los bloques que suman unos 67 votos son:
- Valor
- UCN
- FCN-Nación
- PAN
- Unionistas
- Prosperidad Ciudadana
- Podemos
- Humanista
- Viva
- Vamos
- Todos
Hay más aliados: una fracción de la UNE y diputados de BIEN con lo cual el apoyo llegaría a 98 y 100. Para destituirlo se necesitan 107 votos.
Lucrecia Hernández Mack, diputada del bloque Semilla, que votó en contra de que Rodas sea llevado al pleno dijo:
“Mi miedo es que haya una alianza con diputados conservadores que, aunque no sean procorrupción, le hagan el juego a los diputados que buscan impunidad. Yo estoy muy preocupada de que puedan juntar los 107 votos”.
La diputada mencionó que el apoyo de Victoria, quienes no acudieron a la Comisión de Derechos Humano, puede sumar al desaforo, pero Juan Carlos Rivera, diputado de este bloque responde:
“Creemos que ha hecho su función y no votaríamos de quitarlo del frente de la PDH”.
Sin argumentos
La anterior legislatura no tuvo éxito en sacar a Rodas de la PDH. Una de las excusas para increparlo fue el saludo a un grupo de mujeres que portaban una imagen llamada “la santa vulva”
Hoy, el enojo es que salude con la bandera de la diversidad sexual. La diputada Lucrecia de Palomo, del bloque Valor, entregó a la Comisión de Derechos Humano un documento que señala “un nefasto comportamiento público” de Rodas y que el magistrado se ha convertido en un “influencer LGTB” palabra que se repite. La molestia es que en el sitio de Internet de la PDH, se unió a la celebración digital del “Día del Orgullo Gay”. Esto no lo hizo, por ejemplo, con el Día del Ejército, le reprochan.
Los planteamientos de una legislatura a otra, parecen un “copy paste” donde solo cambian los actores:
Fernando Linares Beltranena fue uno de los diputados que lideró en la anterior legislatura la lucha contra Rodas, hoy es Lucrecia de Palomo. Estás eran las palabras de Linares Beltranena antes:
“Vemos que usted presentó quejas por el despojo de tierras indígenas, sin embargo, no nos habla que las haya presentado por despojo de personas no indígenas y eso nos parece que tiene una inclinación racista que favorece a una a parte de la población”
Aquellas palabras las repite hoy Lázaro Zamora, diputado Unionista:
Ha puesto en evidencia su sesgo ideológico, no ha atendido los derechos humanos de otras personas, promoviendo el aborto, el derecho a la propiedad privada; no se ha pronunciado por fincas y propiedades en todos lados.
CICIG el enojo
Estuardo Galdámez, exdiputado y excandidato presidencial de FCN-Nación, hoy prófugo de la justicia reprochó a Rodas la defensa de extranjeros; también lo hizo el excongresista Luis Hérnandez Azmitia:
“Vi un montón de amparos defendiendo extranjeros” Galdámez.
Hernández Azmitia: en lugar de estar defendiendo oficiosamente extranjeros no va y defiende a guatemaltecos que están privados de libertad.
Rodas: yo defiendo chinos, suecos, colombianos, cualquier persona que esté en el territorio nacional es mi mandato defender sus derechos humanos.
Sandra Morán, exdiputada, cree que la causa es una y es impunidad.
“La CC y el PDH son los únicos que quedan para contrarrestar esta acción de control total del Estado por la corrupción”.
Rodas ha librado varias batallas desde 2007 una de estas fue en 2018 cuando la Corte Suprema de Justicia, por espurio, rechazó un antejuicio contra Rodas, promovido por el Congreso.