Las noticias falsas, cuya recurrencia en la política estadounidense hace eco en el resto del mundo, tiene un origen que pocos conocen. Luis Assardo, periodista e investigador, cuenta:
“Este término lo acuñó Craig Silverman, un periodista canadiense que trabaja en Buzzfeed news. En el 2016, cuando él va a Rusia y descubre que existían lugares donde había gente contratada para crear sitios de noticias falsos y donde inventaban información.”
Assardo asegura que el propósito de difundir noticias falsas es manipular:
“Cuando hablamos de desinformación, noticias falsas y demás estamos hablando explícitamente de manipulación. La manipulación de alguna forma va de la mano con la propaganda. Las dinámicas y las prácticas de la propaganda, que conocemos desde hace muchos años, son las mismas que se utilizan, pero que obviamente se han ido adaptando. De lo que hablamos es de manipulación pagada, que es propaganda.”
¿Cómo saber si cae en la trampa? Assardo explica que las mentiras se construyen con sencillos pasos.
Primero los autores señalan una injusticia y luego nombran a un enemigo colectivo:
“Una vez señalado el culpable, inician los estereotipos y ahí podemos encontrar una variedad enorme. Desde facho, chairo, izquierdoso, empresario corrupto… Cualquier etiqueta para que la gente deshumanice a ese enemigo colectivo que hace cinco minutos no sabía que existía.”
Segundo, se crea una identidad social que tiene como base la indignación y se normaliza la violencia como respuesta a ese adversario:
“Resulta ser que tenemos un enemigo común todos nosotros y si nos juntamos, podemos luchar contra él. Ahí es donde se establecen esos grupos de ataque. Mucha gente, a estos grupos, les dice netcenters y no tienen absolutamente nada que ver con los netcenters.”
Los netcenters son agencias que facturan para realizar campañas, generalmente mediante ataques. Estos juegan un papel fundamental en la difusión de desinformación en Guatemala.
Assardo expone sus características:
«La diferencia entre un netcenter y lo que no es un netcenter está las publicaciones como esfuerzos pagados. (…) Tenemos que analizar qué dinámicas utilizan: por ejemplo, si descubrimos que otras 1 mil 500 cuentas publican el mismo texto y todas fueron creadas el mismo día; si publican información de dos sitios web creados el mismo día, que utilizan la misma plantilla y que estas costaron 100 dólares. Existen cosas pagadas y que publican al unísono la misma información, alguien está pagando por que eso ocurra. Cuando vemos esa dinámica a eso le llamamos netcenter.”