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¿Qué pasa cuando llega el cáncer y no hay un seguro para cubrir los tratamientos? Por la cabeza de María Isabel Mckenzie, de 53 años, pasó el fin, pero una decisión de 15 años atrás salvó su tratamiento.
“…se me cerró la mente a pensar que yo tenía un seguro y que no sabía si este me cubría. Yo soy trabajadora independiente y no tengo Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) y pensé que no podía dejar a mi familia sin nada: porque como puede ser algo simple, también puede ser complicado. Pero indagué y sí me cubría el seguro. Es que los tratamientos son muy costosos. Esto es una alcancía, no tiene fondos.
Hay pacientes que pueden sobrellevar el cáncer, bajo tratamientos costosos financiados por el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) que reserva Q1.6 millardos para esta enfermedad.
Elvira Monterroso, quien luchó un año contra el cáncer, no puede acceder fácilmente a un complemento medicinal que previene que la enfermedad no vuelva.
“Estoy tomando un inhibidor hormonal. Mi tratamiento lo llevé en el San Juan de Dios, pero en el IGSS se autorizó un complemento al que yo estoy tomando, pero son Q50 mil al mes, algo que está muy fuera de mi alcance y no lo tomo.
En promedio mensual de la atención por paciente en el IGSS es de Q22 mil 575 dependiendo del tratamiento.