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El gobierno del presidente Bernardo Arévalo se enfrenta a un nuevo pulso con los Consejos Departamentales de Desarrollo Urbano y Rural (CONADUR). El fin del presidente es sentar la primera fase del gobierno departamental, que busca: desarrollo, gasto transparente y recuperar el territorio. La primera etapa del proyecto fueron los cambios para elegir Gobernadores, un proceso que generó no poca resistencia. Ahora, ante la elección de representantes gubernamentales y no gubernamentales del Consejo, a celebrarse en octubre próximo, el gobierno suscribió nuevas reglas, entre estas:
- No podrán integrar CONADUR quienes vivan fuera del departamento donde participan.
- Los servidores públicos tampoco podrán ser parte.
- Los representantes de los pueblos indígenas, deben ser autoridades o dirigentes de las organizaciones representativas.
Rutilia Ical, representante del pueblo q’eqchi’ ante el CODEDE de Alta Verapaz y opositora al gobierno critica que inhabilite a los funcionarios: ¿Entonces queremos que cualquier persona llegue ahí?, debe tener conocimiento legal y de la administración; se maneja la ley de los CODEDES, la Constitución y ley de Presupuesto. Este gobierno lo que quiere es restringir y cooptar el sector no gubernamental y no tener oposición.
Víctor Hugo Godoy, secretario de coordinación Ejecutiva de la Presidencia (SCEP) señala que durante 31 años se han invertido Q47 millardos vía los consejos y los resultados no han sido los esperados.
El sistema de Consejos es un Frankenstein, en donde cada paso es susceptible de corromperse; pero no es una cuestión que se hizo con dedicatoria a los representantes no gubernamentales, sino para sanar la representación tanto gubernamental como la no lo es. Principalmente porque los delegados departamentales no responden a las políticas sectoriales de sus ministerios sino a los diputados o alcaldes. Entonces la tercera fase será la instauración del gobierno departamental en donde participa la sociedad, las instituciones y las corporaciones municipales.
Los cambios al reglamento de la ley de CONADUR incorporan instituciones como la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SESAN), el Consejo Nacional de la Juventud (CONJUVE, la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente (SOSEP), Secretaría de Bienestar Social y el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) a los consejos.
El gobierno señala que estas no existían cuando la ley fue creada y que realizan tareas fundamentales en los departamentos. Orlando Salanic, representante de ONG ante el CODEDE de Quetzaltenango, tiene su propia interpretación: Desde una visión social consideramos que la intención de fondo es buena, pero en la práctica está ampliando la representación del gobierno. Eso lo que hace es incrementar la cantidad de votos a la hora de tomar una decisión, obviamente siempre habrá una mayor cantidad de votos a favor del gobierno.
Para este año, con la ampliación presupuestaria y los aportes extraordinarios los CODEDES manejarán unos Q5.9 millardos. El secretario presidencial señala que, además de recuperar el territorio, se quiere evitar la fuga de los fondos: -hay oposición- porque hay prácticas arraigadas, que es lo que hay que erradicar para evitar la fragmentación. A nosotros como SCEP, nos toca acompañar a 2 mil 600 proyectos y esto se ha prestado a que sean los intereses de las compañías constructoras, de los diputados y los alcaldes los que sobresalen y no las necesidades de las poblaciones.
El funcionario señala que la tercera fase será la instauración del Gobierno Departamental. El representante de COCODE de Quetzaltenango objeta: diferente es que ellos dijeran: para el departamento X, vamos a crear un gobierno departamental, pero también descentralizar las finanzas, eso sí podría generar un nivel de mejora.
Con las nuevas reglas, los primeros días 10 de octubre las instituciones encargadas deberán convocar para que los departamentos integren el CONADUR que regirá por los próximos 2 años.