Así se escucha la hora de salida en la Escuela oficial rural mixta No.616 “Americana”, conocida como la escuela de Concepción de Las Lomas, en zona 16. Hace 4 meses los papás detuvieron el tráfico del boulevard Rafael Landivar para exigir más maestros y lo lograron. De contar 6  maestros, ahora suman 18 para atender desde kinder hasta 6to. 

Pero esta escuela enfrenta un desafío de raíz que afecta a todos los centros educativos del país: el bajo nivel en la comprensión lectora de los alumnos. Acelya de la Cruz,maestra encargada de 4to grado durante 24 años, cuenta que todos los días abren un libro para enfocarse en desarrollar esa capacidad:

A primera hora se tiene que leer. Todos los días hay lectura. Diferentes: algunas son infantiles, dependiendo del grado que corresponda. Pero toda la escuela de 7:30 a 7:45 am tenemos lectura. 

De la Cruz resalta el rol que los padres de familia juegan en el aprendizaje de sus hijos. La mamá de una niña de 5to grado cuenta cómo apoya a su hija:

Gracias a Dios ella es bastante interesada, le pone interés. Yo a ella le tengo su teléfono y le digo: después de hacer tareas, busca un texto de tal lado y ponete a leer un rato. 

Cristiana de Amenábar, gerente de educación de la Fundación Carlos F. Novella, dedicada a fomentar el desarrollo educativo de comunidades en distintas zonas rurales del país, opina que el problema es que desde muy chicos pierden el interés en leer:

En tercer grado ya no se dan libros de lectura recreativa, porque dicen que lean ciencia, que lean materiales de ciencia sociales, que leen materiales de lenguaje, y no una lectura recreativa que genera esa comprensión lectora más ágil. 

El informe de la evaluación publicado por el ministerio de Educación en 2019 señala que el 56.03 % de los niños de tercer grado aprobaron el examen de comprensión lectora. La cifra, en sexto grado, disminuye a 42.58 %; y en el informe presentado en 2023 por el ministerio de Educación, indica que solo el 30.82% de los graduandos de vocacional  aprobó el examen de habilidades lectoras.

Amenábar atribuye la disminución a la falta de interés de los niños hacia la lectura por no tener materiales atractivos, como novelas o cuentos. 

El resultado es un país menos competitivo para ofrecer capital humano que atraiga inversiones. Un caso vivo es el de la fábrica de motos estadounidense de origen japonés Yazaki, asentada en Ayutla, San Marcos, donde según Eustaquio Méndez, alcalde del municipio, incrementó la oferta de empleo, pero la  habilidad lectora de los trabajadores es puesta a prueba: no siguen instrucciones, se queja Méndez.

A cada persona que entra ahí, le dan una capacitación. Los mandan a capacitar a México, a Nicaragua, a El Salvador o Guatemala.