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Magistrada denunció hace un año sobornos de Giammattei al Tribunal Supremo Electoral de Guatemala
La magistrada del Tribunal Supremo Electoral Blanca Alfaro denunció en marzo de 2022 a la embajada de Estados Unidos que ella y el resto del TSE recibían dinero del presidente Alejandro Giammattei. Tres fuentes confirman a El Faro y ConCriterio la reunión y su contenido.
Publicado el 23 Jun 2023

Magistrada denunció hace un año sobornos de Giammattei al Tribunal Supremo Electoral de Guatemala

La magistrada del Tribunal Supremo Electoral Blanca Alfaro denunció en marzo de 2022 a la embajada de Estados Unidos que ella y el resto del TSE recibían dinero del presidente Alejandro Giammattei. Tres fuentes confirman a El Faro y ConCriterio la reunión y su contenido.

La reunión de la magistrada Blanca Alfaro y los funcionarios de la Embajada de Estados Unidos fue, según una persona que afirmó estar presente, el 22 de marzo de 2022 a las 2 pm, en la antigua sede diplomática estadounidense en la Zona 10 de la capital. Allí, según tres fuentes, la magistrada del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala contó que ella y el resto de miembros del pleno habían recibido, desde finales del año anterior, sobornos del presidente de la República, Alejandro Giammattei.

Dos personas que participaron en la reunión, y una tercera fuente en Washington que fue informada de ella por cauces oficiales, confirmaron a El Faro y ConCriterio que el encuentro sucedió y lo que se habló en él. En un punto, tras relatar dos entregas distintas de dinero a todos los miembros del pleno, sostienen que la magistrada Alfaro sacó de su bolso Q50,000 en efectivo, como ya ha publicado The New York Times, y preguntó “¿Qué puedo hacer con este dinero?”.

Quiso que la Embajada lo recibiera como supuesta prueba de los sobornos, pero los funcionarios se negaron. “El dinero se lo volvió a llevar Blanca Alfaro”, dice una de las fuentes. “Eran fardos sujetos con cintas bancarias”.

Junto a Alfaro estaban dos funcionarios de la oficina de Asuntos Políticos de la Embajada y una cuarta persona de la confianza de Alfaro, a la que ésta había pedido concertar la reunión.

Lo cuenta esa persona, que pide proteger su nombre por miedo a represalias gubernamentales: Alfaro había acudido días antes a ella para pedirle ayuda. Se vieron primero a solas y la magistrada le habló de una entrega de dinero sucedida cerca de la navidad de 2021. “Me contó que en nombre del presidente Giammattei invitaron a los magistrados a una cena y Miguelito (Miguel Martínez) en persona les dio un paquete de regalo que contenía dinero”, dice la fuente. La magistrada pidió ayuda. “Estoy muy preocupada. Yo no soy corrupta”, dice que le dijo.

Alfaro no se atrevía a acudir al Ministerio Público (MP), controlado por la Fiscal General Consuelo Porras, operadora de Giammattei, así que la fuente le ofreció servir de puente con el embajador William Popp. “Me dijeron que el embajador no la podía recibir en persona, y ella al principio no quería reunirse si no estaba él. Pero aceptó, conmigo como testigo”, cuenta.

Consultado por la reunión, el Departamento de Estado respondió, a través de cauces oficiales, que por política “no confirma la existencia de supuestas reuniones o discute el contenido de conversaciones diplomáticas”, y aclaró que “cuando se recibe información que cumple los estándares probatorios de Estados Unidos para casos de corrupción”, se actúa “a través de los mecanismos existentes” para sancionar o designar a individuos.

Sobre si esas acusaciones afectan a la legitimidad o credibilidad del proceso electoral guatemalteco, a solo dos días de la primera vuelta, un funcionario del Departamento de Estado se limitó a afirmar que Estados Unidos “respalda las misiones locales e internacionales que monitorean el proceso previo a la elección y el propio día de votación, como ocurrió en elecciones guatemaltecas anteriores, y que destacan sus puntos de preocupación”.

Fuentes en Washington se muestran, en ese sentido, especialmente prudentes respecto a la denuncia de Alfaro en la embajada de Estados Unidos en el actual contexto electoral de Guatemala, plagado de rumores. 

Alfaro, a sus 52 años, tiene una carrera política además de judicial. Empezó como jueza e integró tribunales de sentencia que conocieron crímenes de narcoactividad y alto impacto, pero luego saltó a la política y fue electa alcaldesa de Masagua, Escuintla, durante dos períodos consecutivos aunque con distintos partidos. En 2019 fue candidata a la Vicepresidencia de la República con el partido Prosperidad Ciudadana. Un año después resultó electa como magistrada del TSE con 139 de 160 votos en el Congreso.

Miguel Martínez declinó dar declaraciones para este artículo. A través de un chat respondió que ya dijo “lo que debía decir”. El miércoles, él mismo anticipó durante una actividad del cierre de campaña del partido VAMOS que el diario New York Times planeaba publicar una investigación sobre la denuncia de Alfaro ante la Embajada de Estados Unidos. “No nos dejemos sorprender, es algo malicioso que desean hacer para desestabilizar las elecciones. No nos dejemos llevar por eso,” dijo a reporteros. 

Se intentó contactar a la actual presidenta del TSE, Irma Elizabeth Palencia, a través de David de León, director de Comunicación Social del organismo, para que respondiera a los señalamientos de sobornos a los magistrados. De León indicó que “es la magistrada Alfaro” quien debe dar respuesta sobre el tema, y envió notas de voz con declaraciones que la magistrada dio a otros medios en las que niega haberse reunido con funcionarios estadounidenses. Alfaro no respondió este jueves 22 ni este viernes 23 a mensajes para incluir en este artículo sus respuestas  sobre la reunión en la Embajada.

A finales de mayo, en una entrevista durante el desarrollo de esta investigación, Gabriel Aguilera, magistrado del TSE, respondió sobre las acusaciones de sobornos: “Es totalmente falso, nosotros no recibimos absolutamente nada del Ejecutivo”, aseguró.

Blanca Alfaro, integrante del Tribunal Supremo Electoral, según una fuente, resultó apartada del resto de sus colegas.

El Secretario de Comunicaciones de la Presidencia, Kevin Oliva, respondió al contenido de este artículo con una carta: «Sin fundamentos se hacen señalamientos al Presidente, pero se trata de sucesos falsos, ficticios e hipotéticos», dice el texto. «Se ha creado una historia basada en falsedades, concediéndole total credibilidad a un supuesto testigo que narra todo lo contrario a lo que los señalados ya han negado». El funcionario califica las acusaciones de «calumnias» y dice que «resulta cuestionable el objetivo de esta nota de cara a la jornada electoral»

«Es necesario aclarar que el presidente de la República no ha tenido reuniones de ningún tipo con magistrados del Tribunal Supremo Electoral, por lo que rechazamos cualquier señalamiento infundado», argumenta Oliva en su carta, a pesar de que en ninguno de los distintos relatos de pagos hechos por las fuentes se habla de un encuentro con Alejandro Giammattei, sino de entregas de dinero a través de intermediarios.

“Usted sabe”

Uno de los cinco magistrados del Tribunal Supremo Electoral relató sin embargo a El Faro y ConCriterio otra entrega de dinero: “Fue Rafa”, dijo. “Pasó entregándolo de vocalía en vocalía”.

“Rafa” es Ranulfo Rafael Rojas, presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) hasta agosto del año pasado. La fuente cuenta que en una ocasión Rojas dejó en el despacho del resto de magistrados y magistradas, vocales del Tribunal, pagos de Q50,000 (alrededor de $6,000) cada uno. Asegura que todos sabían que el dinero venía del presidente Giammattei. “A mí no me pidieron nada, pero usted sabe que, si me mandaban dinero, era lógico…” dijo el magistrado del TSE.

En 2022, partidos políticos y medios de comunicación evidenciaron al partido de Giammattei, Vamos, por incurrir en campaña electoral anticipada. Manuel Conde, diputado del Partido de Avanzada Nacional (PAN) y ya entonces el favorito para ocupar la candidatura presidencial por Vamos, asistía a actividades y giras presidenciales con evidente tono proselitista. En una de ellas, en mayo de ese año, Giammattei anunció en Cuilapa, Santa Rosa, que gracias al apoyo del diputado Conde el bono del Programa del Adulto Mayor, que se entrega mensualmente a cientos de miles de ancianos en todo el país, aumentaba de Q400 a Q500.

En julio de 2022, Miguel Martínez, principal operador político del presidente, pidió directamente el voto para los candidatos a diputados oficialistas, un año antes de la votación. El video, en el que Martínez cantó el corrido Jefe de jefes, se hizo viral y la Unidad de Medios del TSE anunció que analizaría si se había cometido alguna ilegalidad. 

Un año después, aunque la ley prohíbe expresamente el llamado al voto fuera del periodo oficial de campaña, el TSE no ha concluído la revisión del caso.

La anterior administración del TSE había iniciado también investigaciones contra VAMOS por sus cuentas. Giovanni Rodríguez, entonces jefe de Unidad Especializada de Control y Fiscalización de las Finanzas de los Partidos Políticos, presentó el 22 de enero de 2020 un informe de auditoría financiera en que detalla entre otras cosas que “…fue notorio el incremento de hallazgos por asuntos relacionados a la falta de registro de gasto y financiamiento de sus asambleas municipales y departamentales”. Rodríguez recomendó a la unidad de asuntos jurídicos dar el seguimiento correspondiente, pero no hay a la vista otros documentos que permitan verificar el camino que siguió el caso. 

La pandemia y la elección del nuevo TSE favorecieron a VAMOS. El acuerdo 110-220 de este órgano puso en suspenso los plazos para cumplimento de informes, entre otras cosas. Por esos días, los diputados iniciaron con la elección de los actuales magistrados.

No hay registros públicos de cuántas denuncias recibió VAMOS por campaña anticipada. Irma Palencia, ya presidenta del TSE, dijo en una entrevista con ConCriterio en agosto pasado que esas denuncias eran “una reacción de percepción”. Tres meses más tarde, al partido se le dio oportunidad de presentar sus descargos, sin repercusiones. 

La fuente, que habló a condición de anonimato por temor a represalias —“Este presidente es loco”, dijo en referencia a Giammattei—, insistió en que el Tribunal del que forma parte recibe dinero de Giammattei: “todos (los magistrados) están aceptando.”

Aseguró además que en el TSE se conoce la reunión en la Embajada estadounidense y Alfaro está enfrentando consecuencias por su denuncia. “El pleno lo sabe (desde hace tiempo), la tienen apartada”, dijo. Aseguró que la magistrada ha sido aislada por sus colegas y que incluso hubo, a inicios de 2023, un intento de reunir los votos necesarios en el Congreso de la República para destituirla en un eventual proceso de antejuicio (los magistrados de TSE solo pueden ser destituidos bajo acusación que es conocida por el Organismo Legislativo).

Antes de la publicación de este artículo se intentó contactar a Ranulfo Rafael Rojas por teléfono y a través de otros miembros del TSE para entrevistarle, pero no hubo respuesta. 

Mario Taracena, diputado de la UNE, declaró durante una entrevista que Alejandro Giammattei pagaba un sobresueldo a los magistrados del TSE.

“Mario lo dijo con el hígado”

En Guatemala han circulado a lo largo del proceso electoral distintos relatos sobre supuestos sobornos a magistrados del TSE, pero quien los denunció por primera vez en público fue el diputado Mario Taracena, en febrero, durante una entrevista en el programa “A Primera Hora”, de la cadena Emisoras Unidas. “El TSE recibe plata mensual, bajo de agua, y eso nunca lo había visto yo en mi vida y ahora tienen sueldo al mes y por eso le hacen caso al Presidente”, dijo al aire. “Lo que yo nunca viví en 40 años de política fue que pistearan al TSE. Este Tribunal está pisteado.

Semanas después, el diputado explicó a ConCriterio que hizo la denuncia pública esperando que el MP investigara, pero también para alertar al resto de partidos políticos: “¡Cuidado, hay un Tribunal manipulado, manejado, ordenado y pagado!”

El magistrado Gabriel Aguilera cree que Taracena los ataca a él y al resto del pleno porque tras escindirse de la UNE no logró una candidatura y quedó excluido del actual proceso electoral. “Mario lo dijo con el hígado, está molesto porque quedó fuera de la contienda y está molesto con el TSE porque Sandra Torres recuperó el control de la UNE”, comentó. 

Sobre las denuncias contra VAMOS, aseguró que todas siguieron su curso: “o se emitieron sanciones o se archivaron”. “[Al TSE] nos han atacado de diferentes formas. No pasa solo en Guatemala. En todas las conferencias internacionales a las que hemos ido, el tema es el ataque a las instituciones electorales vía la desinformación. Buscan minar la credibilidad para generar el ambiente de fraude”, se defendió.

 

Con información de Henry Bin, reportero ConCriterio.

* Nota del editor: este texto fue actualizado el sábado 24 de junio a las 4:30 pm para incluir el contenido de una carta de respuesta enviada por el Secretario de Comunicaciones de la Presidencia de Guatemala a ConCriterio.

 

Jose Luis Sanz y Claudia Méndez Arriaza