El turismo, que fue uno de los sectores más golpeados desde el pasado mes de marzo por las consecuencias de la pandemia del Coronavirus, sigue en números rojos. Los impactos de ETA y la amenaza de IOTA, generan más incertidumbre en la industria.
Izabal, Petén y Alta Verapaz, sufrieron los embates de ETA. Ahora la amenaza es IOTA, fenómenos que ya tienen efectos en el turismo, tal y como comenta Gerberth Lederer, director de Mercadeo del Instituto Guatemalteco de Turismo (INGUAT):
Se presenta dificultad para visitar estos destinos. El turismo en el resto del país también se ve afectado, porque muchas familias cancelas o posponen s viajes a cualquier departamento, esté no afectado; entonces hasta que no se tenga claridad de recuperación de carreteras no habrá certeza.
En efecto, ETA afectó 41 puentes, 21 de estos quedaron destruidos; 162 carreteras fueron afectadas y 14 destruidas. Con estos daños la recuperación del turismo se prolonga.
Emilio Mendizabal, presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo (COCODE), en Río Dulce, Izabal, cuenta que los primeros días, posteriores a la depresión ETA, tomaba hasta 8 horas llegar a aquel departamento, por daños en los puentes, Jones y Santiago, en jurisdicción de Zacapa, no obstante:
“Yo me encuentro en la capital y me pude percatar que ya hay paso, no se está haciendo cola y el viaje lo hicimos en 5 horas y media, que está entre lo normal”.
En Izabal el 80% de la persona viven del turismo señala el comunitario, y con la pandemia el trabajo se vino en picada. Con la reactivación económica en octubre esperaban recuperarse, pero no llegó la calma, sino la tormenta y el huracán:
A la orilla del Lago, la comunidad Punta Caimanes, y en Río Dulce también otras localidades se vieron afectadas. dependemos de que baje el agua y si con esta tormenta llegara a llover como con ETA el nivel no va a bajar rápido. El vecino cree que no es prudente visitar el lugar por lo menos en una semana y media.
Los sitios turísticos más afectados son, en Alta Verapaz: Laguna Lachuá, Semuc Champey, las Cuevas de Candelaria y las Grutas del Rey Marcos, entre otros. En Izabal: Castillo de San Felipe y Quiriguá.
Petén, es otro importante sitio turístico que, aunque el Parque Nacional Tikal no tuvo impactos directos, si ha afectado; dice Billy Cruz, de la filial de la Cámara de Turismo en aquel departamento:
Se empezaba a ver una luz de la gente que quería viajar, pero al momento de estar así todo se contrae todo y se cayeron muchas de las reservas, pasamos de estar repuntando a estar vacíos. Los hoteles tuvieron una baja del 30% y 40% de sus reservas y lo más preocupante es que dejaron de recibir reservas y eso preocupa porque confiábamos en la época de fin de año.
Según datos Inguat en 2019 se recibieron 2.5 millones de turistas y se percibió en divisas US$1.2 millardos; por el impacto del Covid-19 se calcula que habrá una diferencia en ingreso de turistas de 78% y 80% de divisas. El director de Mercadeo comenta que octubre el turismo nacional mostraba expectativas:
En octubre el 58.9% de las personas encuestadas han hecho un viaje adentro de Guatemala como parte de la estrategia del turismo interno. El 58% no ha viajado por el covid-19, 22% por situación económica y 20% otra inseguridad.
Sacatepéquez, Guatemala y Escuintla son los departamentos más visitados tras la suspensión de restricciones por el Covid-19.