La noticia de que Óscar Schaad dejó la Fiscalía de Delitos Electorales corrió como pólvora la semana pasada; la justificación fue que el fiscal solicitó una licencia por tres meses, con goce de salario. Esa fue la vaga explicación de las autoridades Ministerio Público (MP). Julia Barreda, vocera de la institución sostiene que es la única versión oficial hasta el momento.
ConCriterio recibió información de personas relacionadas al fiscal y de fuentes vinculadas con su labor que coinciden y confirman que Schaad, junto con toda su familia, abandonó Guatemala de manera inmediata debido a amenazas.
La vocera del MP insistió que este miércoles se podrán conocer más detalles sobre la ausencia de Schaad, ya que Consuelo Porras, Fiscal General, ofrecerá una conferencia de prensa para informar sobre el Plan Operativo del día de las elecciones, lo cual involucra a la fiscalía en mención que hoy no tiene a su fiscal titular.
La abrupta salida de Óscar Schaad ha generado dudas entre fiscales y personal administrativo de la institución. Ellos también sospechan de que la salida del investigador no es común, pero nadie se atreve a opinar frente a los micrófonos.
Elvyn Díaz, exsecretario del MP, cree que la situación es grave, porque atenta en principio con la vida del funcionario y sus familiares, pero además con la independencia del trabajo investigativo:
Seguramente si son amenazas fuertes, lo que nos está diciendo es que no fueron aisladas, que fueron permanentes y que pudo haber sido también con mensajes fuertes que quizá no solo correspondían al trabajo del fiscal, sino a todo su entorno cercano.
El MP tiene que sentar un precedente y enviar un mensaje claro a las estructuras criminales, señala Díaz:
El MP no puede dejar impune esta situación, tiene que investigar de donde provenían estas amenazas, porque si no se sienta un mal precedente de que cualquier fiscal que esté haciendo su trabajo, estaría expuesto al poder de determinadas estructuras.
Claudia Paz y Paz, exfiscal General de la Nación, también debió dejar en 2014 el país para garantizar su seguridad, tras concluir su gestión en el Ministerio Público y desde entonces ha vivido en Estados Unidos. La gestión de Paz y Paz se enfocó en combate de la impunidad en casos de violaciones contra los derechos humanos. Y ante el caso de Schaad comentó:
Es preocupante que un fiscal tenga que salir del país por recibir amenazas, creo que el fiscal Schaad es un gran fiscal y que estaba haciendo un excelente trabajo y lamento mucho que esté pasando por esta situación, lo ideal sería que un investigador recibiera las medidas de seguridad necesarias para que no abandone ni su puesto ni su país.
La única forma de frenar esta amenaza opina Paz y Paz es que se investigue y determine de dónde proviene el hostigamiento. Y cuestiona si se prestó la atención adecuada al tema y si se actuó con diligencia:
Sería terrible que él haya tenido que abandonar el país por no haber recibido la protección que necesitaba para poder permanecer en allí.
Los trabajadores de la institución dudaron desde el principio sobre la versión oficial y señalan que el trámite de autorización de vacaciones suele ser lento. Incluso, dicen, hay trabajadores que llevan 3 años sin gozar el descanso de ley, mientras que a Schaad se le autorizó el permiso en tres días. La rapidez despierta más dudas entre los colegas del fiscal.
Las investigaciones a cargo de la Fiscalía a de Delitos Electorales se concentran actualmente casos de financiamiento de los partidos, PAN, UCN, Encuentro por Guatemala, URNG, WINAQ, VIVA y TODOS.
Además del seguimiento en los juzgados al caso de los aportes de campaña FCN-Nación de 2015, en el cual están involucrados 5 prominentes empresarios del país.
El último caso que llegó a esa fiscalía fue el que denunció Manfredo Marroquín, presidenciable de Encuentro Por Guatemala, quién puso sobre la mesa la sospecha de compra de votos por pare del partido oficial FCN, supuestamente con fondos estatales.