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Cuatro de cada 10 guatemaltecos reportan tener un familiar en los Estados Unidos, hay quienes tienen hasta 20, según el estudio Sobre El Impacto de las Familias Guatemaltecas, ante el Fenómeno de la Migración Irregular. Los migrantes son una importante fuente de ingresos para el país, en 2023 rompieron récord en el envío de remesas, la cifra se situó en 19 millardos de dólares, que representaron el 20% del Producto Interno Bruto (PIB), pero el dinero no es la única ayuda, que envían sus familias. También es común que cada cierto tiempo en las casas se reciban enormes cajas con diferentes artículos: ropa, zapatos, artículos para el hogar.
Todos los días los paquetes hacen fila en las aduanas, pero desde principios de este año la Superintendencia de Admiración Tributaria (SAT), anda con lupa buscando cómo cobrar más impuestos y los empresarios de encomiendas se quejan de que no hay un criterio regulado de cobro y más bien son discrecionales, aseguran.
Fredy Muñoz, es integrante de Bussines Assotiation Guatemala-USA, con sede en Washington DC, una organización que alberga a unas 35 empresas de encomiendas, señala:
Como no tiene un valor comercial porque no hay ninguna transacción sino que son cosas personales y bienes privados, entonces la SAT, ajusta los valores para cobrar impuestos a su antojo y sin ningún fundamento, porque no se tienen establecido un límite, porque la ley es muy ambigua.
Los empresarios consideran que están pagando el doble o el triple, y que los costos los tienen que trasladar a los migrantes. Entre Q120 y Q150 mil están los rangos por contenedor y según nosotros deberíamos de pagar no más de Q40 mil.
Este reportero planteó las preguntas a la SAT, pero contestaron que por temas de agenda no pudieron validar la información. Miguel Gutierrez, exjefe de la SAT: ese criterio hace mucho tiempo que está e imagino que lo que hace la institución es un ajuste por inflación. Si quieren salirse de ese esquema y les parece abusivo, que facturen. Ahí los tratados amparan a la SAT, para aplicar criterios técnico-aduaneros.
La asociación de empresarios de encomiendas en Washington, asegura que atiende cada año a unos 3 millones de guatemaltecos. Cada día las 35 compañías hacen un recorrido diario de 165 mil kilómetros para recoger los paquetes que llegarán a las casas guatemaltecas. Huehuetenango, Quiché y San Marcos, son los que más encomiendas reciben, en cada departamento se atendió a poco más de 300 mil familias en un año. Los envíos llegan especialmente por barco y tardan un mes en llegar. ConCriterio consultó algunos precios y el cobro es por medidas de caja independientemente del peso:
Aquí en California, el precio es de 340 dólares de 30×30.
En otra empresa que hace envíos desde Ohio, cobra US$260 por la caja más pequeña -16x16x16- y US$480 -24x24x48- envían también barriles plásticos, el costo del más pequeño es de US$360 y el más grande US$380.
Estos empresarios de remesas en especie hacen cabildeo, el presidente Bernardo Arévalo, les prometió en una visita que hizo a Washington, que instalaría una mesa técnica, pero han pasado los meses y no se lleva a cabo. También han visitado a diputados, buscan que los congresistas generen una ley que proteja las encomiendas. Rodulfo Santizo, empresario en EE.UU.
No hay una ley que especifique la que la encomienda debe ser cobrada como tal, porque no genera factura; la paca sí porque eso es para negocio. Por eso estamos promoviendo una ley para darle el valor social a la encomienda. Al migrante no le dan nada de beneficios y le quieren imponer impuestos.
Se quejan también de que no se está respetando el sistema aleatorio selectivo que debe tener toda importación y que el 100% las cajas son sometidas a selectivo rojo en las aduanas. También señalan que hay decomisos de mercancía. Señalan que la mayoría de veces el revisor considera que los artículos son para comercializar.
La migración guatemalteca en Estados Unidos de América, se estima en 11% y es mayoritariamente joven y de género masculino, con edades de 15 a 39 años, en su máxima expresión de edad productiva.