La historia es cíclica y los esquemas de corrupción en el Ministerio de Comunicaciones Infraestructura y Vivienda (MICIVI) y el gobierno del presidente Alejandro Giammattei repite las prácticas corruptas de la administración de Otto Pérez Molina, alerta Aldo García, extitular de esa cartera entre 2016 y 2018:

Creo que han regresado a lo que pasaba durante el gobierno del Partido Patriota, cuando obligaban a la constructora a diseñar el proyecto y entonces, se repite la historia de Odebretch: van diseñando conforme van avanzando y van metiendo los costos a su gusto.

El 23 de mayo el MICIVI adjudicó un contrato de Q522.9 millones a la Constructora Carmor para ampliar a 2.3 kilómetros de largo y 45 metros de ancho de la pista de aterrizaje del del Aeropuerto Internacional de Carga que funcionará en la Base Aérea de Escuintla, pero el espacio a construir no está claro y las autoridades guardan silencio.

El proyecto despierta suspicacias: la constructora, cuyo representante es Carlos Francisco Carias Sandoval, posee dos contratos en 2006 para la reconstrucción de pista de aterrizaje en Coatepeque, Quetzaltenango, por el cual el gobierno pagó Q5.9 millones, Q1 millón más del costo inicial de la obra. Ese mismo año recibió otro contrato por Q.4.6 millones, para trabajos en aeropuertos por la emergencia por la tormenta Stan.

El exministro García, añade:

“no cualquiera puede ofertar una pista de aterrizaje; tiene determinadas especialidades: señalización, construcción, un buen estudio de suelos. Esta empresa es muy nueva y  si no le ponen el asfalto apropiado, puede haber accidente”.

Aeródromo San José, Escuintla.

La constructora ha sido contratista del Estado desde 2005 y desde esa fecha ha percibido Q806.2 millones y sus participaciones se centran en: construcción de muros, reparación de escuelas, recapeos y mantenimientos.

El 28 de enero de 2021 el presidente Giammattei acudió a la cabecera departamental de Jalapa, para inaugurar el proyecto de mejoramiento del Instituto Dr. Silvano Antonio Carias Recinos, papá del propietario del Carmor, la empresa contratada para ampliar la pista del aeródromo. El papá del constructor fue asesinado junto con uno de sus hijos con una ametralladora en enero de 1981.

Este reportero llamó a la sede de la compañía en Jalapa, a los números de la compañía registrados de empresas precalificadas, pero no respondieron.

También solicitó una entrevista con autoridades del ministerio de Comunicaciones, pero al cierre de la nota no hubo respuesta.

¿Sobrevaloración?

Las reparaciones de la pista del aeropuerto internacional La Aurora, costaron Q55 millones en 2017 cuya pista mide 2.9 kilómetros de largo, con un ancho de 60 metros.

Eddy Cux, abogado del Centro Legal Anticorrupción (ALAC), compara los metros y trabajos de La Aurora y el proyecto adjudicado:

Es evidente que hay una sobrevaloración, si una obra con similares medidas, es indudable que hay sobre precio y eso pasa porque los órganos de control no están funcionando ni la Contraloría ni el MP dan seguimiento a cómo se está adjudicando y con estas grandes cantidades de dinero.

Otra de las dudas es que la constructora fue la única que ofertó el proyecto. Y el abogado de ALAC, señala:

Tienen a sus proveedores designados y muchas veces no cumplen con las capacidades.

El presupuesto del Ministerio de Comunicaciones, es el tercer de mayor volumen con Q8.6 millardos, después de Educación y Salud. En marzo el Congreso, aprobó Q3.1 millardos más a la cartera, sin destino especifico. La oposición, señala que se trata de bolsones de corrupción.

Las investigaciones sobre sospechas de corrupción en la institución

no prosperan: la entrega de Q141 millones a una docena de empresas de allegados a Allán Rodríguez, expresidente del Congreso o los Q146 millones que Fredy Chojolán, exdirector de Caminos, entregó a constructoras de sus familiares y qué decir de los contratos que se entregaron a empresas que financiaron la campaña del presidente Giammattei.