A donde quiera que la brújula apunte este 2023, habrá una escuela sin agua en Guatemala. En 2022, Edna Leticia Portales, viceministra técnica del Ministerio de Educación (MinEduc), reconoció ante diputados del Congreso de la República que 8 mil 700 centros educativos no tenían agua.
A 107 kilómetros de la capital está la escuela Santa Clara, en Santa Clara, Chajúl, Quiché. Este centro arrastra, de toda la vida, dos maldiciones: no tiene agua ni drenajes. Instalada entre calle de tierra y piedras, el 20 de febrero recibirá a unos 175 estudiantes. Juan Josué Chel, profesor que impartirá cuarto grado primaria:
En la comunidad no hay agua potable ni entubada, la que utilizamos es la que recibimos de la lluvia; acá llueve constantemente, pero igual el líquido es escaso y se contamina. Nunca ha habido agua en la comunidad, no hay nacimientos cerca, el que existe queda como a 8 horas, pero ¿quién va a viajar para ir a traer agua hasta allá? Es difícil.
Alumnos de la escuela Santa Clara; en Santa Clara, Chajúl, Quiché.
En este lugar las pipas no llegan debido a la topografía. La escuela logra almacenar 10 mil litros en 4 tinacos, pero no es suficiente para atender a sus alumnos de preprimaria y primaria:
Cuando se termina, llamamos a los padres de familia y ellos se encargan de llevar agua a la escuela.
Uno de los puntos más dramáticos de la Escuela Santa Clara es que beben del agua de la lluvia y, aunque han tenido purificadores, para este año los existentes ya cumplieron su tiempo de vida:
¡No tenemos! El año pasado contábamos con seis y eran dos aulas por un Ecofiltro, entonces necesitamos que los alumnos consuman agua limpia.
Tres años estuvieron los estudiantes fuera de las aulas del sector público. Este 20 de febrero regresarán, pero poco ha cambiado en sus establecimientos. ConCriterio solicitó una entrevista con autoridades de Educación, pero no hubo respuesta. La ministra Claudia Ruiz, durante entrevista transmitida en Noti7 el miércoles pasado, llamó al 2022 el año de los logros y destacó entregar alimentación escolar de 2.8 millones.
No mencionó el tema del agua, aunque habló de mantenimiento de los edificios escolares:
En el 2022 remozamos 2 mil 971 centros educativos a través de la Organizaciones de Padres de Familia (OPF) y tenemos proyectado para 2023, 3 mil 520 centros.
El sistema educativo cuenta con 49 mil centros educativos públicos y privados, de los cuales unos 32 mil 600 son públicos.
Tan solo a 10 kilómetros de la capital, en colonia Santa Faz, zona 6, se ubica la escuela República de Italia. Cada año, es un suplicio mantener la higiene en el centro. La falta de agua resta horas de estudio a los chicos cuenta Johana Reyes, mamá de una estudiante que este año ingresará a cuarto primaria:
Cuando empieza a faltar el agua, solo van dos horas a estudiar y los regresan para que los niños no entren a los sanitarios. Y como son niños, muchos no se aguantan. Los baños se ensucian y genera muchas enfermedades, porque entrar a un baño así y no lavarse las manos… antes del COVID, lo que hacían era que le pedían que una llevara dos tambos de agua por alumno.
El estudio “Más y Mejor Educación en Guatemala (2008-2021)”, de la agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y elaborado por el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) indica que la falta de agua es determinante en rendimiento de los estudiantes.
Verónica Spross, directora ejecutiva de Empresarios Por la Educación: es un desafío bastante grande y tiene que haber participación municipal porque ellos tienen fondos de IVA Paz, que se pueden aplicar a infraestructura escolar, también fondos de los Concejos Departamentales de Desarrollo (CODEDES), así que las municipalidades son un actor clave para lograr que haya condiciones sanitarias adecuadas en las escuelas.
El MINEDUC es la cartera con el mayor presupuesto de los ministerios, cuenta para 2023 con Q22.2 millardos de los cuales solo Q150 millones son para inversión.